¿Te ha parecido que el primer mes del año avanzó con lentitud inusual? Si tu respuesta es ‘SÍ’, no estás solo. Esta percepción de que enero 2024 tarda en pasar es un fenómeno reportado por muchas personas, como fue el Blue Monday o 'el día más triste del año'. Ahora explicaremos el por qué sentimos que enero duró mucho tiempo.
Expectativas vs. Realidad
El cambio de año viene acompañado de expectativas, metas y resoluciones. La motivación de un nuevo comienzo puede hacer que enero se sienta como un mes de transición cargado de planificación y expectación.
Al estar tan enfocados en lo que está por venir, la espera puede parecer eterna, distorsionando nuestra percepción del tiempo.
Sesgo de la memoria reciente
Nuestro cerebro tiende a sobreestimar el tiempo que han tomado eventos recientes en comparación con aquellos que sucedieron hace más tiempo. Como enero es el primer mes del año, es posible que esté más fresco en nuestra memoria y por tanto se sienta más largo en retrospectiva.
Rutinas post-vacacionales
Las festividades de fin de año traen consigo una ruptura de la rutina habitual. Al volver a las actividades cotidianas, las cuales pueden ser menos emocionantes, cada día puede percibirse como más largo. Además, el ajuste de regresar al trabajo o la escuela después de un tiempo de ocio puede hacer que enero parezca extenderse.
Clima frío y días más cortos
En muchas partes del mundo, enero es un mes invernal con días más cortos y menos horas de luz solar. La falta de luz solar puede afectar nuestro reloj biológico y nuestro estado de ánimo, contribuyendo a que el tiempo se perciba como más lento. Además, las condiciones climáticas pueden limitar las actividades al aire libre, resultando en días que parecen más monótonos.
Un nuevo comienzo
Cada año, enero simboliza un nuevo comienzo y una oportunidad para establecer metas y objetivos. Este periodo de reflexión y proyección hacia el futuro puede hacer que estemos más atentos al paso del tiempo, dándonos la impresión de que el tiempo se alarga a medida que anticipamos los resultados de nuestros esfuerzos.
La percepción de que enero es más largo que otros meses puede estar influenciada por una combinación de factores psicológicos, biológicos y sociales. Desde las expectativas de un nuevo año hasta los ciclos de luz natural y pasando por la vuelta a la rutina, hay muchas razones por las cuales podemos sentir que enero se extiende más de lo usual.