Un 85 por ciento de los animales que se encontraban en las granjas de los avicultores se perdió debido a la sequía que se registró en los últimos años.
Esta situación afectó a los productores de Altamira que se vieron afectados debido a que varias de sus granjas desaparecieron tras la muerte de familias de avispas.
Angélica González García, apicultora de Altamira, señaló que el calor acabó con varios animalitos que no soportaron el intenso calor y eso de alguna manera merma su producción, que de por sí y era baja.
Expuso que ahora su plan es repoblar estos lugares con ayuda de las autoridades principalmente con atención simple para que ahora que inicia la temporada estos animales no sean exterminados y se utilicen labores para trasladarlos a los colmenares.