La recuperación de los edificios históricos que datan de hace más de 200 años y que se ubican en la zona centro de Tampico está siendo atractivo para empresarios de la localidad. Recuperar hechos históricos que han marcado a esta ciudad y que permanezcan en la memoria de los tampiqueños, es el objetivo principal que se han trazado.
Casa Gándara, ubicada sobre las calles Emilio Carranza y Sor Juana Inés de la Cruz, es el siguiente museo que tendrá Tampico en el centro histórico de la ciudad, el segundo que proyectará la transformación que se ha vivido a lo largo de los años en el puerto jaibo.
Pero, también, la participación de Tampico en la historia de México como parte de la Revolución, Casa Gándara en 1865 fue construida por el General Manuel González Flores, presidente de México durante 1880 y 1884.
La historia señala que el expresidente de la República modificó la constitución civil para que su hijo Manuel González Horn heredará la vivienda tipo palacete.
Casa Gándara entre los años de 1913 y 1914 fue establecida como cuartel y despacho, utilizando el sótano como mazmorra y prisión, ejecutando a algunos presos y es que Tampico fue tomada por revolucionarios carrancistas y el General Pablo González tomó la vivienda.
Fue hasta 1930 cuando la casa es rentada y habilitada como clínica con consultorios para brindar atención médica a los trabajadores de Ferrocarriles Mexicanos.
Tres años después se establece como una vivienda familiar, pero también siguen los consultorios debido a que fue comprada por el Doctor Enrique Gándara Yáñez, quien juntó con sus hijas Carmen y Mercedes iniciaron actividades altruistas y la vivienda fue mejor conocida como “La casa de las Gandaras”
Años antes de la pandemia, el 27 de junio de 2013 fue abierta al público como museo y centro cultural, además en el mes de octubre fue habilitada como casa del terror, esto debido a que el sótano y sus pasadizos en el pasado fueron escenario de "hechos terroríficos" resultando algo muy atractivo para la gente.
Lamentablemente, en el año 2021 fue cerrada al público debido a que tras un estudio realizado, se detectó que la infraestructura ya no era una fortaleza y sus muros inferiores y fachadas comenzaban a caerse, representando esto un riesgo para sus visitantes.
Tras este estudio realizado se hablaba de que se necesitaban 10 millones de pesos para su recuperación.
La fachada principal y muros tienen grietas que van creciendo, las lluvias registradas han provocado fisuras, que pueden llegar a afectar a sus visitantes, pero también a los peatones que transitan diariamente por esta parte de la zona centro, al desprenderse partes de su barda perimetral y banquetas que están al pie del edificio.
A pesar de las condiciones en las que se encuentra actualmente, para los tampiqueños las paredes de la Casa Gándara guardan risas, conciertos, obras de teatro, exposiciones fotográficas, así como la admiración por el edificio catalogado como histórico de quienes se adentraron en el recinto cultural durante varios años y también los gritos aterradores de la casa del terror.
Afortunadamente, el pasado 12 de abril del presente año, el empresario Carlos Dorantes del Rosal dio a conocer que adquirió la Casa Gándara y será convertida en museo histórico, mediante una reseña en diversas modalidades se mostrará la historia del inmueble.