En Ciudad Madero existe un hospital de imágenes religiosas llamado “Galerías Vaticano” que se ha ganado este nombre, porque han llegado piezas con gran daño en su estructura, pero al salir, lucen como nuevas. Es un hospital de piezas religiosas, es el único concepto hasta el momento en la zona que se dedica a recuperar imágenes que, por su condición, muchos pensaban perdida.
Dalia Olivares Salazar, es una arquitecta quien, junto con un grupo de colegas, montó el proyecto en el que han trabajado por diez años y en donde han logrado salvar piezas únicas de hasta 200 años de antigüedad. El material que trabajan es yeso, resina de vidrio, pastas, madera; siendo el vidrio el único material que consideran no restaurable.
"Las imágenes que más nos traen es el niño Dios, la Virgen de Guadalupe, San Judas Tadeo, el Señor de la Misericordia; sin duda la que más nos llega es el niño Jesús, en todos sus tamaños, y el costo varía debido al material", comenta Dalia.
La arquitecta destaca que el costo tiene mucho que ver con el tipo de material que se trabaja, así como, la antigüedad que tiene la imagen; sin embargo, muchas veces a las personas no les importa, al tratarse de una pieza que ha pasado de generación en generación y tiene un gran valor sentimental, además, no es lo mismo reparar una pieza de 10, 20 o 30 años que una con una antigüedad de 150 o más de 200 años.
Incluso nos muestra que es ella la restauradora de las imágenes y precisamente cuando brindó en exclusiva la entrevista para Grupo Fórmula, trabajaba en una imagen a base de madera, que data de hace 150 años y que ha pasado por 5 generaciones: bisabuela, abuela, madre, hija y nieta; esta imagen llegó con un brazo zafado y un dedo quebrado, el tiempo que se tarde puede variar desde una semana completa, hasta tres, dependiendo de las complicaciones; ya que al ser de madera, se trata de una superficie dura, pero por dentro es muy blanda la pieza.
Celebraciones como el Día de la Candelaria son muy importantes para la comunidad católica, por eso las familias se preocupan por reparar sus imágenes, y es a partir de octubre cuando incrementa la demanda de personas que buscan embellecerlas.
"Debe estar uno concentrado en trabajar al 100 estas piezas, porque se trata de reliquias con gran significado familiar, precisamente, cuando se celebra el Día de la Candelaria, es que muchas personas traen a sus niños para restauración o mantenimiento, es decir, darles vida para mejorar la pintura", comentó.
Debido a la calidad en los trabajos que realizan se ha posicionado, incluso hasta en el extranjero, ya que las familias locales los recomiendan con los que se encuentran en Estados Unidos y cuando vienen de viaje, traen sus imágenes y se las llevan, prácticamente nuevas.
Se trata de un hospital de imágenes religiosas y mucho más, pues ellos las reciben muchas veces destruidas, rotas, sin vida; siendo Galerías Vaticano quien las entrega curadas. Ellos se encuentran en la zona centro de Madero, sobre la calle Sarabia, justo a unos pasos de la presidencia municipal.