Investigadores de la Universidad de Sonora (Unison), niegan que la mega zanja que se formó por la apertura de la tierra en el ejido J. Cruz Gálvez de la zona rural de Hermosillo, sea por la falla de San Andrés, que genera movimiento en las placas tectónicas.
Alonso Tarazón, propietario del rancho donde ocurrió el fenómeno, detalló que este 10 de septiembre acudieron al predio investigadores de la Unison y trabajadores de Protección Civil, para iniciar con los trabajos y determinar la causa.
“Apenas acaban de llegar, van a checar aquí. Vienen de la Universidad y de Protección Civil”, dijo.
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El investigador del departamento de Geología, José Ismael Minjárez Sosa, indicó que dichas grietas tienen tres posibles orígenes, que son fractura del terreno, bombeo excesivo de agua subterránea y colapsos del subsuelo.
La mega zanja provocó la muerte de cinco animales y generó gran asombro entre quienes atestiguaron el hecho.
Tiene una longitud de más de 200 metros, con una profundidad de unos cuatro metros.