Para despedir a la Nayela “N”, la oficial de policía que se arrebató la vida al interior de la comandancia municipal de Ciudad, Obregón, amigos, familiares y compañeros de corporación, le brindaron el último adiós.
En medio de llantos, lamentos y oraciones, recordaron a la mujer que dejó enorme consternación en la sociedad.
Con misa de cuerpo presente y el último pase de lista, policías municipales honraron el trabajó que desempeñó con pasión hasta el último día.
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Con acto conmemorativo, decenas de patrullas circularon por las inmediaciones de la comandancia portando una corona fúnebre.
De igual forma, entonaron canciones que Nayela escuchaba para guardar su memoria y despedirla como ella hubiera querido.
Nayela de 34 años, dejó a tres hijos en vida y a su esposo. Desde pequeña deseaba ayudar a la sociedad y fue por ello que se incorporó a las filas de la seguridad pública.