En el corazón de la zona maya del estado de Quintana Roo, se encuentra X-cabil, en el municipio de José María Morelos, un pequeño poblado de poco más de mil personas el cual tiene un vínculo especial con las abejas meliponas que va más allá de la producción de miel, procurando su conservación y preservación.
La labor que desempeñan los habitantes de esta comunidad es crucial para el cuidado no solo de la abeja melipona si no del equilibrio en el ecosistema de la región, esto por la importancia de esta especie.
Créditos: Miguel Puc Pat
Años atrás, la gente de X-cabil pasó por momentos complicados, ya que la mayoría de los pobladores son apicultores, es decir, que dependían económicamente de la miel, y los precios de este producto, al depender de intermediarios, el valor que les ofrecían era menor a 30 pesos por litro.
Ante esta situación se dieron a la tarea de encontrar alguna alternativa que le diera mayor valor a su producto, fue así que desempolvaron practicas ancestrales para el cuidado de estas abejas también conocidas como Xunan Cab, una especie endémica de la Península de Yucatán que se caracteriza por no tener aguijón.
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Créditos: Miguel Puc Pat
Los apiarios de este poblado se distinguen por tener "jobones", troncos secos de madera apilados en forma de pirámide, donde las abejas construyen sus colmenas, estos troncos son custodiados por abejas guardianas en la única entrada de la colmena, quienes defienden activamente el lugar contra invasores como moscas y otros insectos.
El papel de las abejas meliponas en la selva maya va más allá de la producción de miel. Son vitales para la polinización de muchas especies vegetales, contribuyendo a la diversidad y conservación del ecosistema.
Además, su miel es altamente valorada por sus propiedades medicinales, ya que se le atribuyen beneficios para la cicatrización de heridas, problemas respiratorios y la salud ocular, entre otros.
La comunidad ha encontrado en el ecoturismo una forma de compartir su riqueza cultural y el conocimiento ancestral sobre las abejas. Los visitantes tienen la oportunidad de conocerlas y entender su cuidado, así como, aprender sobre la importancia de preservarlas.
La ruta de la miel se ha convertido en una experiencia enriquecedora, donde se puede observar la dedicación y el respeto que se tiene hacia estos pequeños insectos.
La tradición de cuidar a la abeja melipona ha prevalecido por varias generaciones en X-cabil, fusionando sus prácticas ancestrales con el ecoturismo y encontrando una nueva forma de sustento para esta población que se encarga de la protección de estas abejas endémicas