Durante este 2022, el personal de la línea de atención psicológica del Instituto para Prevenir Conductas de Riesgo brindó primeros auxilios psicológicos en mil 606 llamadas de la ciudadanía, en el periodo de enero a agosto, indicó su titular Tere Borbolla
Las llamadas consignadas ante la línea telefónica 070 y el 2-38-77-00 atendieron a un total de mil 216 mujeres y 390 hombres.
Códigos de atención
Según su padecimiento y afecciones, el personal clasificó el despacho de las llamadas en tres códigos; verde, amarillo y rojo; en donde se brinda atención inmediata a domicilio; se canaliza a la persona a un centro de ayuda de primer, segundo o tercer nivel de atención; o se le ayuda vía telefónica a resolver su problemática.
“La finalidad de la línea es brindar primeros auxilios psicológicos; contenemos, atendemos y vinculamos a los usuarios a servicios de segunda y tercera ayuda”, comentó la titular del Instituto para Prevenir Conductas de Riesgo.
Según el protocolo de atención, en semáforo verde con un total de 624 llamadas, se atendieron trastornos con sintomatología leve, como por ejemplo problemas de insomnio, en donde se le brindó al paciente herramientas para sanar.
Al siguiente día los operadores telefónicos realizan una llamada de seguimiento, para ver cómo evoluciona el paciente con las estrategias de sanación.
Para el caso de las llamadas en semáforo amarillo, las cuales acumularon 790 en el periodo, se les da mayor contención y vinculación a segundas o terceras ayudas, a una instancia en la cual se le indica al paciente a dónde será canalizado, qué esperar del espacio a donde lo van a vincular, y cómo sería el desarrollo de la vinculación.
“Somos una línea que le da seguimiento a los usuarios, no solamente recibimos la llamada, sino que una vez que recibimos a los usuarios les damos seguimiento en dado caso de que los hayamos vinculado a una instancia secundaria de las redes que tenemos identificadas”, comentó Tere Borbolla.
En cuanto a las llamadas retenidas en color rojo, sumaron el periodo 192 atendidas, que involucran ya problemas severos emocionales y laceración física de una persona, la cual se encuentra en estado de vulnerabilidad, y por este riesgo se aplicación de un protocolo al para canalizar ayuda mediante el apoyo de la línea 911.
Además de canalizar al paciente a una instancia de tercer nivel como es el Centro Estatal de Salud Mental.