Teresa Borbolla Olivares, titular del Instituto para Prevenir Conductas de Riesgo en el Municipio de Querétaro, señaló que al menos 10 personas en situación de calle rechazaron ingresar al hogar de transición para su reinserción a la sociedad.
Por tanto aseguró se trabaja para evitar la mala imagen de este organismo, el cual aclaró no es un anexo como la población muy generalmente cree.
“El alcalde nos instruyó a ampliar las acciones que se realizan en el Hogar de Transición, para recibir a la mayor cantidad de personas que se puedan en el espacio para que puedan tener un servicio donde dormir, y lo tenemos habilitado para 40 personas”, comentó Teresa Borbolla Olivares.
Asimismo la funcionaria municipal indicó que existen reglas y ordenamientos para las personas que aspiran a ingresar al Hogar de Transición Cambiando Vidas.
Por ello, muchas personas se niegan a ingresar y ser atendidos, máxime que la gran mayoría que mantiene un interés por estar en el lugar es dependiente a sustancias tóxicas.
“El hogar de transición no recibe adultos mayores ni menores sin tutores. Muchos usuarios no pretenden formar parte del programa porque se les limita los horarios en calle, o pueden estar en temas de consumo, hay que hacer un trabajo comunitario, tiene reglas. No a todo el mundo le gusta”, señaló Teresa Borbolla Olivares.
A lo largo del 2022, la funcionaria municipal comentó que existen cerca de 13 brigadas de invitación y se logró atender 31 reportes ciudadanos de presencia de personas en situación de calle en sus colonias.
En ese sentido, señaló que se establecerán mecanismos para “desmitificar” la operatividad del Hogar de Transición Cambiando Vidas, pues recalcó, algunas personas en situación de calle piensan que se trata de un centro de rehabilitación de adicciones con reglas y medidas de seguridad.