Dos obras monumentales en la misma superficie, pero en distintos momentos de la historia de Poza Rica, Veracruz. Primero, la construcción de un centro deportivo monumental denominado 'Cancha Antonio J. Bermúdez' y 16 años después, su belleza fue destruida para convertirla en una plancha de cemento: la Plaza Cívica '18 de Marzo', la cual actualmente está en manos del vandalismo.
Poza Rica surge de un campo petrolero, contando con la superficie suficiente para su crecimiento a lo que actualmente conocemos.
De ello, el boom industrial le benefició a Petróleos Mexicanos (Pemex) y, al mismo tiempo, el beisbol era el Rey de los Deportes. Fue donde las palmeras, explicó el actual cronista de la ciudad, el ingeniero José Luis Rodríguez Badillo, en su libro Por la sendera del recuerdo, que ese predio, por su ubicación, comenzó a ocuparse en 1939 como espacio para eventos cívicos que la empresa productiva tenía a su cargo, porque ese lugar era su propiedad.
"A pesar de que el entonces superintendente de Pemex, ingeniero Jaime J. Merino ha sido considerado un cacique, para algunos, también se le debe reconocer que “pensaba en grande”. Es el autor de obras de gran relevancia para este municipio que se comparaban con otras de importante nivel en el mundo, ya que él administraba los recursos del llamado 'Oro Negro', porque Poza Rica fue considerada la capital petrolera de México, debido a la producción petrolera que le aportaba a la nación".
Fue en 1940 que por órdenes de Merino se iniciaron trabajos para crear un campo de beisbol, que fue construido con apoyo de trabajadores petroleros que ocuparon tubos, madera y lámina, materiales que estaban en desuso y con este fin podrían ser aprovechados. De esto surgió la liga deportiva del Rey de los Deportes, en coordinación con la base obrera de la Sección 30 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), quienes también son enlace histórico de Poza Rica, hoy municipio libre.
El perímetro de lo que inició como la cuna del deporte se ubica en el centro de la ciudad, muy cerca de Correos de México, del Palacio Municipal y la Escuela Primaria “Articulo 123 María Enriqueta”. Parte del legado de Jaime J. Merino, juzgado por el pasado como un “dictador” a pesar de las joyas arquitectónicas que había aportado, incluyendo el mural del pintor Pablo O´Higgins, "Desde las primitivas labores agrícolas hasta el actual desarrollo industrial petrolero, el cual engalana la fachada del edificio de gobierno local".
El cronista de Poza Rica, José Luis Rodríguez Badillo, comparte que entre el auge petrolero y el amor por el beisbol, fue que el 17 de marzo de 1953 se inauguró oficialmente la conocida “Cancha Bermúdez”, con la presencia del gobernador de Veracruz, Marco Antonio Muñoz Trumbull y el senador por el estado de Chihuahua y al mismo tiempo director de Pemex, Antonio J. Bermúdez, por su puesto, sin faltar Jaime J. Merino, con el entonces alcalde de Poza Rica, Raúl Lara Mendoza.
Fue un lugar de ensueño para el deporte local y nacional, porque contó con las condiciones para distintas disciplinas, como basquetbol, donde dio origen al famoso equipo “Ola Verde”, que representaba la ciudad, como también contó con un parque para los peloteros. Pero además con una alberca de talla olímpica, que quienes la conocieron, principalmente algunos de los fundadores de Poza Rica, advierten que “jamás se podrá olvidar”, ya que añoran la belleza de esta y todas las áreas de este coloso deportivo, considerado el mejor de Latinoamérica, inversión que se concluyó en una segunda etapa, completamente equipado para atender aficionados en una capacidad superior para 7 mil 500 butacas, por ello en 1958 dejó su designación de cancha por “Deportivo Antonio J. Bermúdez”.
En la historia de Poza Rica se describe que este templo deportivo tuvo la presencia de personalidades como Edson Arantes Do Nascimento “Pelé”, junto con su equipo “Santos” de Brasil, el 9 de febrero de 1959. También se realizaron juegos estelares de beisbol, a nivel internacional, porque también se contó con un equipo local de beisbol que participaba en las grandes ligas.
También atrás quedaron en los recuerdos de eventos que también dieron alegría, describe José Luis Rodríguez Badillo:
“Espectáculos de primera categoría que trajo a lo mejor del momento de México y el mundo, basta recordar a artistas como Pedro infante que vino a cantar, a Mario Moreno Cantinflas en una singular corrida de toros, los muy famosos Pilotos Infernales de Francia, Peleas de Box donde participo el peleador papanteco, Fermín El Gallego Gómez, despareció el famoso Callejón Merino y dio paso a la Calle Dieciséis Oriente, en donde se establecieron importantes negocios".
También atrás quedaron en los recuerdos de eventos que también dieron alegría, describe José Luis Rodríguez Badillo.
“Espectáculos de primera categoría que trajo a lo mejor del momento de México y el mundo, basta recordar a artistas como Pedro infante que vino a cantar, a Mario Moreno Cantinflas en una singular corrida de toros, los muy famosos Pilotos Infernales de Francia, Peleas de Box donde participó el peleador papanteco, Fermín El Gallego Gómez, despareció el famoso Callejón Merino y dio paso a la Calle Dieciséis Oriente, en donde se establecieron importantes negocios".
Fue que para el 21 de agosto de 1967 se dio a conocer que el “Deportivo Antonio J. Bermúdez” sería demolido, y a pesar de la inconformidad de las y los pozarricenses, se llevó a cabo la destrucción de esta joya arquitectónica, dejando una tristeza para las generaciones que forjaron el municipio y para niños y jóvenes que disfrutaron de sus instalaciones, incluyendo al arquitecto Arturo Ham Fernández, quien tuvo la responsabilidad de construir la siguiente obra que quedaría para la posteridad, como recuerdo en la añoranza de una gloria, con la Plaza Cívica “18 de Marzo”.
Bellos recuerdos, bajo una plancha de cemento
La obra se construyó con diseño de Arturo Ham, quien actualmente vive en Poza Rica. La Plaza Cívica se inauguró el 19 de marzo de 1969, que a palabras expresas del propio creador, prácticamente se instaló una “plancha de cemento” que sepultó los bellos recuerdos del pueblo.
A 55 años, la Plaza Cívica “18 de Marzo” perdió el esplendor como espacio destinado para lo que fue en su inicio este predio, para actos cívicos y recreativos. Muy al pesar de la inversión que pretendió el gobierno del exgobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, con la creación del Domo “Bicentenario”, que se presentó con una infraestructura para área cerrada y climatizada a fin de realizarse eventos artísticos y culturales, prácticamente para pagar la deuda política de quienes ordenaron el derribe del deportivo “Bermúdez”.
Actualmente, la plaza cívica «18 de Marzo» y el domo «Bicentenario» son ocupadas de manera frecuente, para eventos de emprendedores como para realización de ferias y conciertos de artistas populares, como “La Trakalosa de Monterrey”, que cobraron por el acceso de su público, pero no contribuyen a los daños que han provocado. Nadie, como particulares, asume su responsabilidad para el mantenimiento de la misma.
"Se puede destacar que este lugar ha sido escenario para eventos gratuitos en el 2010, con los conciertos de artistas de renombre internacional cómo Yuri, Mijares, Alberto Barros o el Festival Poza Rica de las Artes, con la cartelera de estrellas de prestigio como Astrid Hadad, Francisco Céspedes o Pablo Milanés. A esto se añaden otros eventos como graduaciones, festivales de los distintos niveles educativos y hasta de proselitismo político, dónde el mismo actual presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, en su pasado político ha escogido este lugar en varias ocasiones con sus seguidores".
Cabe mencionar que el Ayuntamiento de Poza Rica, en la actual administración que encabeza el alcalde Fernando Remes Garza, reconocido beisbolista internacional, se determinó inversión aprobada por el cabildo, por 1 millón 294 mil 932 con 99 centavos para la rehabilitación del techado sobre el «Bicentenario», recurso que se utilizó para ordenar la fabricación de piezas que fuesen similares a las hojas metálicas originales que en el 2013 se instalaron ya que no existe actualmente su producción. Así también se realizó una rampa para uso de la población con algún tipo de discapacidad en movilidad, así como reparación de luminarias que estaban severamente dañadas.
De forma lastimosa, el tiempo ha cobrado factura y los daños continúan en el inmueble que hoy le pertenece al pueblo, pero también el grafiti y el robo de letras metálicas que le daban identidad a este recinto, los propios ciudadanos marcan su derecho a la libertad de expresión contra la misma historia de Poza Rica.