La Selección Nacional tuvo la primera prueba sobre la convocatoria exclusiva de Jaime Lozano y pareciera que, después de la obtención de la Copa Oro, hay mucho por trabajar. Contra Australia, en partido amistoso de la fecha FIFA, el nuevo cuerpo técnico no se quiso guardar nada y desde un inicio alineó al once con mayor experiencia, a pesar de que alguno que otro elemento no estuviera en su posición natural por ejemplo, Edson Álvarez, que ha tenido un inicio de temporada aceptable en la Liga Premier de Inglaterra, no jugó en la zona de la cancha en la que mejor se desempeña, la contención, y a pesar de que hizo un buen trabajo en la central, lugar en el que le ubicaron en esta ocasión junto a Johan Vázquez, hubo algunos detalles en la marca que tendrán que ser atendidos para encontrar la forma en la que puedan estar en la cancha los mejores elementos tricolores sin colocar a ningún elemento fuera de la zona en la que juega normalmente. Desde el banquillo se apostó a tratar de tener mayor seguridad en la zona baja, poder tener posesión del balón desde la salida y armar desde el fondo los ataques mexicanos. Pero a la Selección le costó mucho trabajo controlar el medio campo, Australia colocó muchos elementos en media cancha y durante varios lapsos del encuentro le ganó a México esa zona, tapando y complicando la salida del Tricolor.
El empate como resultado final contra Australia, no es un gran resultado, sobre todo, porque se tuvo que remar contracorriente para poder alcanzar en el marcador a una selección australiana que, en el papel, no debía complicarse demasiado, pero que en la realidad resultó un rival que incomodó y por poco obtiene el resultado, Australia tuvo una ventaja de dos goles hasta casi el minuto 70; controló el medio campo y ganó en jugadas a balón parado, así es como llegó el primer gol, contra las que México se había preparado, consciente de que es una forma en la que se recibe mucho daño. Australia estudió bien a su rival, los cobros de tiros libres y desde la esquina buscaron hacer daño a México a través jugadas a las que los rivales recurren una vez que conocen las carencias mexicanas con la marca, siempre confiando en que Guillermo Ochoa no saldrá a colgarse del balón con un centro dirigido hacia primer poste o dentro del área chica.
El cuerpo técnico de la Selección tuvo que mover la alineación para que el equipo empezara a responder ante la inoperatividad a la que Australia le empujó; el ataque mexicano se quedó muy corto con los hombres de inicio, Vega no pasa por su mejor momento y el 10 de la selección pasó desapercibido durante el tiempo que permaneció en la cancha. Resulta evidente, y algo desconcertante, el bajón de juego por parte del jugador de Chivas, tomando en cuenta que atrás de él vienen empujando jugadores con muchas ganas de quedarse con un lugar en el equipo nacional; además de que su posición también la ocupa un referente del Tri, Hirving Lozano. Los jugadores que recibieron su primera convocatoria y vieron sus minutos de debut en este encuentro, dejaron una sensación de querer repetir en siguientes convocatorias; Yordi Cortizo y César Huerta entraron avanzado el segundo tiempo para mostrarse y dar otra cara al ataque mexicano. Cortizo se vio muy participativo, pidiendo el balón y manejando la zona de creación, mientras que Huerta hizo lo que en su club, cada vez que le llega el balón trata de ir hacia adelante, ser incisivo intentando siempre encarar al rival y hacer una jugada que pueda romper las líneas de la defensa rival; el premio le llegó con el gol que dio el empate a México, un debut soñado.
El martes la Selección Nacional enfrentará a Uzbekistán, sin tener muchas referencias sobre el rival, se espera que el conjunto dirigido por Jaime Lozano pueda jugar con mayor libertad, pero mostrando jerarquía. El rival no es un equipo que en Asia destaque, nunca ha asistido a una Copa del Mundo, por lo que no debería ser un partido que se complique; aunque sabemos que no hay rivales pequeños, al ser un encuentro amistoso, se tendría que demostrar la jerarquía de un fútbol que no ha faltado a ninguna justa mundialista. Pero esta Selección Mexicana que apenas comienza su proceso, aún no tiene la consolidación necesaria para ser determinante en 90 minutos y después del resultado y las formas del encuentro frente a Australia, no se puede asegurar la victoria.