En la vida todo puede suceder. Y por algo los lugares comunes, por más deleznables que sean, siguen ocurriendo.
Un día te sonríe la persona que más has amado; al otro, te avisan que murió el perro de la infancia.
Así, en las curvas y rectas de la existencia, nos hemos acostumbrado a saltar entre vagones de sorpresas.
En la política pasa lo mismo.
Te podría interesar
Un día Xóchitl Gálvez toma por asalto al mundo al asombrar con su inusitado crecimiento en las encuestas.
Luego pasa que la alianza opositora se despedaza entre sí:
- Claudio X. González, padrino del Frente, ofende a los priistas.
- ‘Alito’ Moreno y Moreira reaccionan con estridencia ante los dichos del empresario.
- No pasan ni dos días de ese pleito, cuando la propia Xóchitl Gálvez denuncia fraude en la recolección de firmas para buscar la candidatura opositora.
- Menos de 24 horas después, Jorge Luis Preciado anuncia que renuncia al PAN, pues el proceso presidencial de la oposición es una farsa plagada de trampas.
Y mientras el Frente se tropieza con sus propias agujetas, en Morena la cosa parece ya estar casi definida.
La única sorpresa la da Noroña, que se ha vuelto el caballo negro de la contienda e incluso quedó en segundo lugar, detrás de Claudia Sheinbaum, en un simulacro de encuesta que realizaron los morenistas en Estados Unidos.
Como dice la canción, en la oposición hay muchas alarmas y en la 4T pocas sorpresas.