Cuando lo que más le hace falta a la Liga Mx es la continuidad, surge el reiterativo problema mayor de cada semestre. La falta de resultados de distintos equipos tiende a que las directivas corten por la parte delgada del hilo; los proyectos se terminan antes de tiempo con cambios en el banquillo técnico. Resulta extraño cuando es el propio Director Técnico el que pretende hacerse a un lado, sin estrictas razones deportivas. La salida de Mohamed de Pumas parece incomprensible cunado llegó con el equipo a una semifinal en un periodo relativamente corto, el Turco tomó las riendas del equipo de la Universidad Nacional en un momento de crisis, casi terminando el Torneo de Clausura pasado y, de alguna manera, logró enderezar el barco que empezaba a hacer agua con una crisis deportiva, sin resultados positivos ni protagonismo en la liga. En este semestre, que está a punto de terminar, Pumas recuperó un poco de la confianza que había perdido, se armó un equipo que, aún con diferencias notables con los equipos de mayor presupuesto, se dispuso a competir en un Apertura 2023 en el que llegó a la clasificación de liguilla en el cuarto lugar general, zonas que no había pisado el equipo auriazul en varios torneos. Las intempestivas salidas de distintos clubes por Antonio Mohamed son conocidas, pero esta vez argumentó problemas personales que le afectan en su propia tranquilidad, el entorno universitario tendrá que respetar esta decisión y conformarse con la sustitución inmediata de Gustavo Lema, quien fungía como primer auxiliar del Turco, tomando como referencia al Atlético San Luis, el movimiento podría ser funcional.
Gustavo Leal se hizo cargo del banquillo del equipo potosino ante la salida del que era titular rumbo a América; el actual técnico de San Luis asumió la responsabilidad de la dirigencia del equipo confiado en que su experiencia a lado de Jardine sería suficiente para el reto. Cumplió. Al frente del equipo llegó a probar las mieles del liderato en el Apertura 2023 y logró mantener un promedio de puntos que le dio acceso a liguilla, a través del Play in. Eliminar a Monterrey en el propio estadio rayado fue un triunfo que no se le puede adjudicar a cualquiera, con esto demostró que sí está a la altura de cualquier equipo de la liga mexicana. La semifinal contra América, contra su mentor en la dirección técnica, fue un accidente de esos que le pueden ocurrir a cualquier otro técnico; en el partido de ida le sorprendió una retahíla de malas decisiones dentro del campo de juego que derivaron en una goleada muy dolorosa, pero de la que se aprendieron varias lecciones. En la vuelta en el Estadio Azteca pudo poner en práctica lo aprendido y, para sorpresa del americanismo se llevó la victoria dos goles a cero, sin nada que perder y mucho por ganar, le plantó cara al líder del torneo que decepcionó a su afición y mostró una vulnerabilidad que puede resultar peligrosa de cara a la final.
Ya no será un equipo inexperto al que América enfrente en la última instancia del Apertura 2023; Tigres es un equipo sólido, con muy buen fútbol e individualidades capaces de resolver series de eliminación directa, por lo que la derrota contra San Luis de América como local toma relevancia ante la jerarquía del próximo rival. Tigres tuvo una serie de semifinal tranquila ante Pumas; la eliminatoria se definió en Ciudad Universitaria con la victoria del visitante, en el Volcán, la vuelta pareció un mero trámite; aunque el conjunto auriazul puso algo de presión con el gol del Toro Fernández muy temprano en el partido, el local ajustó rápidamente para empatar el partido y navegar sin preocupaciones rumbo a otra final.
Tigres es un equipo acostumbrado a estas instancias, mientras que América ha batallado para instalarse en finales, quedando cerca y lejos de varias en semestres anteriores; al inicio del Apertura 2023, el americanismo no se veía muy confiado con la llegada de un nuevo Director Técnico del que no se tenían referencias, el entorno azulcrema esperaba un entrenador de alto perfil con paso por clubes de jerarquía internacional, pero Jardine cumplió, y con creces, lo que un club como América exige. A unos días de la final y el deseado campeonato, enfrentará a un equipo que ya sabe jugar y ganar finales, con una dirección técnica sobria y también experimentada que busca sumarse a la lista de los bicampeones en torneos cortos.