Las fechas conmemorativas internacionales son un buen instrumento para recordar, promover y tomar acción en línea con las causas o luchas históricas a favor del desarrollo y bienestar de las sociedades, dado que son una oportunidad para sensibilizar a la población, incluyendo los gobiernos y organizaciones sobre esa lucha y en el mejor de los casos, promover acciones concretas. Sin embargo, estamos convencidos que no tendríamos que esperar un día concreto para generar diálogos relevantes, invitar a la sociedad a poner su granito de arena y tomar acciones reales, eso es algo que deberíamos hacer todos los días. El cambio climático y sus consecuencias lo vemos en nuestra vida diaria, como el reciente Huracán Otis que azotó el estado de Guerrero la semana pasada, prueba de que es un tema que supone una responsabilidad y un riesgo para absolutamente todas las personas de nuestro planeta.
Si bien la reducción de los gases de efecto invernadero (GEI) es indispensable para lograr limitar el aumento de la temperatura del planeta, uno en particular se ha vuelto muy relevante: el metano. Tan solo una de las moléculas de metano tiene un potencial de calentamiento hasta 80 veces mayor que el CO2 en los primeros 20 años después de su liberación a la atmósfera (1). En términos de toneladas de emisiones, según Naciones Unidas, considerando un horizonte de tiempo de 100 años se observa una equivalencia de 1 tonelada de metano por 21 toneladas de CO2; para un horizonte de 20 años, esta equivalencia se eleva a 56 toneladas de CO2 (2). Esto significa que entre el 30 y el 50% del incremento en las temperaturas se debe al metano, de acuerdo con un informe realizado en 2021 por el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) (3). Se estima que el 60% del metano presente en la atmósfera proviene de actividades humanas, siendo una de sus fuentes más grandes la descomposición de residuos vertederos, legales e ilegales, así como rellenos sanitarios. Es por esto que la Unión Europea, los Estados Unidos de América y sus asociados han puesto en marcha el Compromiso Mundial para promover la mitigación de metano a corto plazo. México también es uno de los firmantes de este compromiso.
En México, la generación de residuos sólidos urbanos (RSU) es alarmante. De acuerdo con cifras de la plataforma digital científica Conexión Cinvestav (4), quien retoma datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), en el año 2022 en México se produjeron aproximadamente 53.1 millones de toneladas de RSU al día. Es importante destacar que cada tonelada de basura depositada en un vertedero produce 4 kg de metano lanzado a la atmósfera. En otras palabras, cada vez que se desechan residuos municipales se generan grandes cantidades de emisiones dañinas para el medio ambiente.
Por tal motivo, la valorización de los RSU antes de que lleguen a los rellenos sanitarios para reintegrarlos en un proceso productivo es imprescindible, lo que implica una responsabilidad compartida entre los sectores público y privado. Un manejo integral, eficiente y sostenible de los RSU no solamente contribuiría a avanzar hacia una economía circular, sino a disminuir considerablemente las emisiones de metano. No obstante, el reto conlleva desarrollar nuevas innovaciones tecnológicas que permitan hacerlo una realidad.
Una opción económica y ambientalmente viable para la valorización de los RSU es la gasificación. Esta tecnología consiste en calentar los residuos hasta que se transformen en un gas renovable llamado gas de síntesis que después es empleado para elaborar un aditivo descarbonizante, esto sin llegar a la combustión de los residuos. Dicho proceso de gasificación elimina la necesidad de recurrir a la incineración de los residuos municipales, evitando así la emisión de CH4 en un proceso de descomposición en un vertedero.
En México existen diversas empresas como Blue Arrow Biojet Holdings, que buscan proyectos en los que se emplee el proceso de gasificación con el objetivo de contribuir con los gobiernos municipales y las industrias en alcanzar sus metas de descarbonización en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
En síntesis, el Día Contra el Cambio Climático nos brinda un espacio para tomar conciencia y hacer énfasis en las soluciones a una de las problemáticas más complejas que enfrentamos hoy en día: la gestión de residuos. La valorización de los residuos sólidos urbanos es una oportunidad para reducir las emisiones de GEI y proteger nuestro planeta; y empresas como Blue Arrow nos demuestran que es posible avanzar hacia un futuro más sostenible para combatir el cambio climático.
*Maribel Martínez San Martín es licenciada por la Universidad Anáhuac con una especialidad en Mercadotecnia en Alta Dirección por la Universidad Complutense de Madrid. Cuenta con más de 15 años de experiencia en puestos directivos coordinando, ejecutando y siguiendo campañas de marketing y Relaciones Públicas. Actualmente es Head of Public Relations and Communicatios en Blue Arrow.
(1) United Nations Environment Programme (UNPE). (2023). Datos sobre el metano. Organización de las Naciones Unidas. (ONU). http://www.unep.org
(2) United Nations Climate Change (UNCC). (2023). Global Warming Potentials (IPCC Second Assessment Report). Organización de las Naciones Unidas. (ONU). http://unfccc.int
(3) McGrath, M. (12 de agosto de 2021). Cambio climático: el poderoso gas que cada vez tiene mayor impacto en el aumento de temperaturas (y no es el dióxido de carbono). BBC. http://bbc.com
(4) Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional [Cinvestav] (Noviembre, 2022). Analizan el tratamiento de residuos orgánicos urbanos para su desarrollo sostenible. Conexión Cinvestav. http://conexion.cinvestav.mx???????