¿En qué se parecen Andrés Manuel López Obrador y la Selección Mexicana? En que ambos hicieron tremendos papelones ante Panamá esta semana.
Ni en el Polo Norte se ven osos tan grandes.
Por un lado, el mandatario federal desató la furia del país centroamericano al criticar a sus autoridades por no cumplirle el capricho de darle su beneplácito a Pedro Salmerón, acusado de acoso sexual, como embajador de la nación.
El Tri, por su parte, no hizo nada a lo que no estemos acostumbrados: sufrió un baile ante la selección panameña en el Estadio Azteca y, gracias a una ayudadita, es decir, ayudadota del árbitro, pudo ganar 1-0 con gol de penal de Raúl Jiménez.
El árbitro nunca es imparcial... pero no le digan a Lorenzo Córdova, que se enoja.
Luego de que AMLO acusó a Erika Mouynes, la canciller de Panamá, de comportarse como la Inquisición, causando un conflicto diplomático, Ernesto Pérez Balladares, expresidente de la República de Panamá, aseguró que nuestro titular del Ejecutivo tiene una actitud infantil.
"La actitud del señor López Obrador en cuanto a la designación de su representante en nuestro país es infantil. Somos un país pequeño pero digno y valiente. Más nos necesita México a nosotros que nosotros a México", escribió el exmandatario en su cuenta oficial de Twitter.
En resumen, las declaraciones de AMLO han causado la ira de Panamá. Y la ayudada en el Azteca al Tri no ayuda a calmar los ánimos.
¿La buena? Salmerón ya no será embajador en Panamá gracias a la presión de las mujeres y a que ese país le "hizo el feo".
¿La mala? La Selección no juega a nada... y lo más probable es que vayamos al Mundial, con todo y el Tata Martino.
Ramón López Velarde es hijo de AMLO
n medio de un apasionado discurso para que se investigue el escándalo de la llamada Mansión del Bienestar, la legisladora del Partido Acción Nacional (PAN), Cecilia Patrón, confundió al poeta mexicano Ramón López Velarde con el hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador, José Ramón López Beltrán.
“¿Hoy, legisladores de Morena se rendirán ante la simulación? O ustedes le dirán no a la Mansión del Bienestar de Ramón López Velarde, digan no, de Beltrán. A ustedes y a su familia les pido que tomen conciencia. ¡Corruptos, corruptos!”, lanzó la legisladora desde la tribuna rodeada de sus compañeros de bancada.
Una música íntima no cesa
porque transida en un abrazo de oro
la Caridad de Baker Hughes se besa.
Escribió López Velarde, hijo de AMLO.
La redondez de la Mansión del Bienestar atrueno
cortejando a Pemex y a las cosas
con un clamor pagano y nazareno.
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