Con la Indicación Geográfica Protegida (IGP) la producción y comercialización del pulpo Maya será exclusiva de la pesquería que tiene lugar en los estados que comprenden la Península de Yucatán, de donde se exporta a los mercados de Europa y Asia, principalmente.
Este molusco endémico se convierte así en la primera indicación pesquera en su tipo en México y su captura se mantendrá bajo prácticas de producción sostenible, informó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural. La declaratoria de 'bien nacional' protegerá la captura y comercialización de la especie que se encuentra en las aguas de Yucatán, Quintana Roo y Campeche.
El pulpo Maya se suma a productos como el tequila, mezcal, café, cacao y chile habanero, que a nivel internacional contribuyen a dar identidad a México y cuentan con reconocimiento mundial. Ahora, con la obtención de la indicación geográfica se incrementará el valor y la demanda de este molusco en los mercados nacional e internacional.
La declaración es resultado de una solicitud presentada por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) al Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), a través del Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables (IMIPAS), el pasado 8 de diciembre de 2023.
Pulpo Maya se suma a otros productos mexicanos
Cabe recordar que la diferencia sustancial entre Denominación de Origen e Indicación Geográfica consiste en el vínculo con el lugar de origen, toda vez que las IG no precisan de insumos endémicos y métodos tradicionales de manufactura para su protección, sino que basta con que uno de estos elementos se acredite y que el producto tome el nombre del lugar donde se elabora.
Con la declaratoria, el pulpo Maya se suma a una extensa lista de productos con indicación geográfica, como la cajeta de Sayula, los alebrijes de Oaxaca, las catrinas de Capula, el cobre martillado de Santa Clara del Cobre y la butifarra de Jalpa de Méndez, entre otras.
La Sader precisó que la protección delimita el litoral costero de la península de Yucatán, que incluye los estados de Campeche, Yucatán y el litoral norte de Quintana Roo, en el polígono que abarca desde la línea de costa hasta una profundidad máxima de 12 a 15 metros.
En el acuerdo publicado se establece también que su captura tendrá lugar exclusivamente durante el día y por medio de gareteo o método campechano, un sistema altamente selectivo, caracterizado por capturar únicamente pulpos sin generar pesca incidental, permite regresar al mar a los juveniles y es sustentable por proteger, particularmente, a las hembras que han desovado y se encuentran al cuidado de sus huevos.
"Les comparto que resultado de las gestiones del Gobierno de Yucatan ante el gobierno de México, el pulpo Maya obtuvo la Indicación Geográfica Protegida (IGP), convirtiéndolo en la primera indicación pesquera en su tipo en México y en un bien nacional", escribió en redes sociales el gobernador yucateco Mauricio Vila.
Pulpo Maya, de los mares mexicanos al mundo
El pulpo rojo, pulpo maya o Octopus maya, nombre científico del pulpo, habita en aguas poco profundas, en las grietas de las rocas, huecos, en conchas de moluscos y diversos objetos. Se encuentra exclusivamente en las aguas marinas de la plataforma continental de la península de Yucatán y se caracteriza por contar con un cuerpo blando con simetría bilateral, ojos bien desarrollados con una mancha u ocelo debajo de ellos, tener ocho brazos con dos filas de ventosas.
El periodo de reproducción tiene lugar durante todo el año, con dos picos anuales de madurez y desove, que regularmente ocurre en primavera y en otoño.
Las hembras se reproducen solamente una vez y mueren después de cuidar la puesta. Son capaces de poner un máximo de dos mil huevos y su desarrollo embrionario es directo, sin etapas larvarias, y su talla máxima la alcanzan en aproximadamente 18 meses.
De acuerdo con el estudio de biomasa para la pesquería del pulpo Maya, elaborado por el IMIPAS, en la temporada 2023 se recomendó una captura de hasta 21 mil 392 toneladas en los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Sin embargo, al cierre de 2023 se contabilizaron 19 mil 895 toneladas, es decir, 93 por ciento de la meta establecida. La cifra es favorable dadas las adversidades del fenómenos climatológicos, los bajos precios, la inestabilidad del comercio y el problema social que implica la pesca ilegal.
Con información de la Sader.