El PRD va a perder su registro a nivel nacional, luego de que no alcanzó el 3 por ciento de los votos en las elecciones 2024. Así que el Instituto Nacional Electoral (INE) ya envió al Sol Azteca el oficio preventivo para iniciar con el proceso para eliminarlo. Además, la Unidad Técnica de Fiscalización (UTF) del organismo electoral puso en marcha la fase de prevención, es decir que a partir de ahora todos los gastos del partido tendrán que ser autorizados por ésta.
Así, el PRD comienza con su proceso de extinción después de 35 años desde su creación. La caída del partido empezó desde 2012, cuando Andrés Manuel López Obrador, actual presidente de la República, fue derrotado en la contienda por el Poder Ejecutivo de las elecciones de ese año, por lo que el tabasqueño renunció al Sol Azteca y decidió crear el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), una nueva agrupación de izquierda.
Además, Cuauhtémoc Cárdenas, uno de los fundadores del PRD, también renunció a su militancia y argumentó que su decisión estaba basada en diferencias “irreconciliables” con los dirigentes. Los políticos que estaban al frente del Sol Azteca en ese momento eran Jesús Zambrano y Jesús Ortega, mejor conocidos como “Los Chuchos”.
La corriente de “Los Chuchos”, mejor conocida como Nueva Izquierda, se quedó al frente del PRD. Incluso Jesus Ortega celebró la salida de AMLO, ya que consideró que desde ese momento el partido tendría una sola visión y la división de posturas políticas iba a concluir.
Te podría interesar
¿Qué hicieron ‘Los Chuchos’ en el PRD?
El expresidente Enrique Peña Nieto, quien derrotó a AMLO en las elecciones de 2012, tomó posesión el 1 de diciembre de ese año y un día después se firmó el Pacto por México, el cual fue apoyado por los dirigentes del PRI, PAN y PRD. Lo que fue criticado por militantes y por varias corrientes perredistas, debido a que la decisión fue tomada por Jesús Zambrano, que en ese momento era dirigente, sin consultarlo.
La corriente de “Los Chuchos” justificó la firma del Pacto por México bajo el argumento de que 80 de sus 95 puntos coincidían con los planteamientos del partido. Esto impactó en su rendimiento electoral, ya que en las elecciones estatales de 2013 el PRD hizo una alianza con el PAN, la cual fue rechazada por otras corrientes y por varios seguidores del partido.
El castigo fue que los seguidores del PRD no votaron o emitieron su sufragio por otras opciones políticas. Lo que provocó que el Sol Azteca pasará de ser la segunda fuerza en 2012 a la tercera en 2013.
“Esto hizo que en el PRD se percibiera falta de rumbo como opción de izquierda y un alineamiento con el gobierno federal y su partido, que lo dejó ver como una oposición débil y sin alternativa, lo que se reflejaría más tarde en el proceso electoral de 2015”, de acuerdo con el artículo “El Partido de la Revolución Democrática durante la dirigencia de la corriente Nueva Izquierda”.
El PRD volvió a quedar en tercer lugar en las elecciones de 2015, después del PRI y del PAN. Además, en la Cámara de Diputados sólo obtuvo 61 curules.
Mientras que en la elección federal de 2018, el PRD pasó a ser la quinta fuerza política del país, debido a que sólo obtuvo el 3.4 por ciento de la votación nacional y perdió las gubernaturas de Morelos y Tabasco, así como la Jefatura de Gobierno de la CDMX.
En la jornada electoral de ese año también se aliaron con el PAN y con MC para la Presidencia de la República, su candidato fue Ricardo Anaya y perdieron frente a AMLO.
En el Senado de la República sólo quedó con ocho legisladores, de los 22 que tenía tras las elecciones de 2012. En la Cámara de Diputados sólo se quedó con 21 curules, de los 56 que tenía.
Las elecciones de 2024 y el fin del PRD
El PRD confirmó que contendería en alianza con el PAN y el PRI en las elecciones 2024 desde junio de 2023, cuando empezó la contienda interna en la alianza para definir a quien los representaría en la contienda por la Presidencia de la República.
Miguel Ángel Mancera y Silvano Aureoles, ambos del PRD, quedaron fuera del proceso interno, luego de que no lograron reunir las firmas para pasar a la segunda fase del proceso de selección.
Esto puso en riesgo la alianza del PRD con el PAN y el PRI, ya que después de que esto sucedió Jesús Zambrano, dirigente del Sol Azteca, anunció una pausa en la alianza.
A pesar de que tanto Aureoles, como Mancera, y otros militantes insistieron en que el partido tenía que competir de forma individual, el PRD volvió a la alianza y así se consolidó como Fuerza y Corazón por México, con Xóchitl Gálvez como abanderada de los tres partidos.
La decisión del Sol Azteca volvió a ser castigada por la ciudadanía en las elecciones 2024 y aún con la corriente de “Los Chuchos” al frente del partido. En las urnas, el PRD únicamente obtuvo 1 millón 121 mil 020 votos a su favor, lo que es igual al 1.86 por ciento, de acuerdo con los Cómputos Distritales.
Al no alcanzar el 3 por ciento que establece la ley, el INE empezó con el proceso de desarticulación. El PRD presentó una solicitud en dicho organismo electoral para abrir los paquetes electorales y contar voto por voto; sin embargo, fue negada el pasado 7 de junio durante una sesión extraordinaria.
Ante esto, Jesús Zambrano dijo en entrevista con Azucena Uresti que si el PRD perdía su registro iba a buscar sumar nuevos liderazgos de las organizaciones civiles que forman parte de la “Marea Rosa” o fundar un nuevo instituto político.
“Lo dije desde el pasado 5 de mayo, con motivo del 35 aniversario del PRD, que pasando las elecciones enfrentaríamos un proceso de renovación, de reconstrucción para redimensionarnos y seguir la búsqueda de un fuerza superior, entonces, vamos a seguir ese proceso con o sin el registro, para formar un partido con nombre diferente”, declaró.
Por otra parte, el dirigente dijo que el PRD contará con su registro como partido local en 13 distritos. Así fue como la corriente de “Los Chuchos” y las decisiones que tomaron incidió en la caída del instituto político.