"La boda del huitlacoche" es una de las canciones más virales de Carin León por su buen ritmo y letra pegadiza. Relata cómo fue la boda de dos aves en medio de la selva, con diferentes animales invitados. Para conocer la ciencia detrás de este tema, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) explicó cómo sería esta fiesta en la vida real.
Carin León volvió a hacer popular la canción "La boda del huitlacoche", que fue escrita hace décadas atrás, reinterpretándola con banda, pero respetando la idea original, la de narrar una fiesta en la que que no existen personajes humanos, sino sólo aves.
Para no confundir a los protagonistas de la ceremonia, un huitlacoche y una urraca, la UNAM explicó las características de cada uno de estos animales y cómo pudieron comportarse en la famosa boda.
En primer lugar, está el huitlacoche, que muchas veces se confunde con el hongo del maíz; sin embargo, la Máxima Casa de Estudios dejó claro que en la canción no se habla de este alimento, sino de un ave, el cual también se conoce como cuitlacoche.
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Toxostoma cinereum, nombre científico del protagonista, es un ave desértica, endémica de la península de Baja California Sur, como lo son otros de los animales que participan en la boda.
Cabe mencionar que el título original del tema es "La boda del cuitlacoche" y fue compuesta por Benito Rodríguez de Los Broncos de Reynosa, según los créditos.
Otro de los personajes más importantes es la urraca, la novia del huitlacoche. Su nombre científico es Calocitta collei, habita en los bosques bajos y selvas tropicales, según la UNAM.
Los siguientes en hacer una aparición en la canción son los guajolotes, quienes estaban muy borrachos en la fiesta, según la canción.
Los Meleagris gallopavo —su nombre científico—, que son conocidos por ser ruidosos y por eso el tecolote los habría callado, habrían comido insectos, semillas y plantas en la boda, pues ese es su principal alimentos, explicó la Universidad.
El tecolote, uno de los invitados más tranquilos, al igual que el cuitlacoche es endémico del sur de la península de Baja California.
Otro de los personajes que llegó a avivar la fiesta fue el zopilote, y es que aunque se le conoce por ser un ave silenciosa, es muy sociable, posiblemente por ello es que inmediatamente se sumó a la celebración del huitlacoche.
Es el zopilote quien recuerda que la boda se realizó en la Rumorosa, que también se ubica de donde es originario el cuitlacoche. Popularmente así se le conoce a la carretera que se encuentra entre Mexicali y Tecate, aunque también es una localidad de Tecate, Baja California.
Los que no fueron invitados a la boda del huitlacoche
Unos de los que no fueron a la boda porque no fueron invitados y por estaban muy muinos, o enojados, fueron el correcaminos, animales conocidos por su velocidad al correr.
La UNAM menciona que esta ave alcanza hasta los 24 km por hora.
Para finalizar, la letra menciona que tampoco la güilota fue invitada y por eso se estaba echando "una grandota" alejada de todos.
La universidad explica que este animal, que en el mundo científico se llama Zenaida macroura, es capaz de guardar semillas en el esófago, de esta forma pueden digerir su alimento tranquilamente arriba de los árboles.
Con esta versión de cómo habría sido una de las bodas más famosas de México, ahora tienes una perspectiva más científica de cada uno de los invitados.