El presidente Andrés Manuel López Obrador criticó, sin mencionar sus nombres, a la candidata presidencial Xóchitl Gálvez y a Marko Cortés, líder nacional del PAN, luego de que ambos propusieran el cierre de las refinerías de Tampico y la de Cadereyta, así como la de Tula, Hidalgo.
Y es que el mandatario indicó que no se va a cerrar ninguna porque el presidente municipal de Cadereyta, Cosme Leal, defendió la de su entidad y la de Tampico no existe.
"Una persona dijo que había que cerrar la refinería de Tula, otra más dice que no, que mejor cerrar la de Cadereyta y la de Tampico. Hoy el presidente municipal de Cadereyta dijo que no permitiría que se cerrara la refinería de ese municipio. De modo que ya la libramos porque no se cerrará ninguna, dado que la de Tampico no existe", manifestó AMLO en sus redes sociales.
El presidente mexicano rememoró, en su cuenta de X (Twitter) y en su canal de WhatsApp, la defensa del petróleo hecha por los expresidentes mexicanos Lázaro Cárdenas y Adolfo López Mateos.
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"Recordemos no sólo al general Cárdenas sino también al presidente Adolfo López Mateos, que en 1960 nos advertía: 'No se confíen porque en años futuros algunos malos mexicanos identificados con las peores causas del país intentarán por medios sutiles entregar de nuevo el petróleo y nuestros recursos a los inversionistas extranjeros'", evocó AMLO.
¿Por qué Xóchitl Gálvez y Marko Cortés propusieron el cierre de las refinerías de Tula, Cadereyta y Tampico?
El líder nacional del PAN, Marko Cortés, pidió que se cerrara la refinería de Tula, Hidalgo, debido a las afectaciones que causa en la salud de las y los mexicanos.
De acuerdo con el panista, la planta emite más de 50 mil toneladas anuales de dióxido de azúfre y más de 5 mil toneladas anuales de partículas PM2.5 que causan padecimientos cardiovasculares, respiratorios, cáncer y enfermedades cerebrovasculares.
Mientras que la candidata de la Coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, indicó que si gana la presidencia cerrará las refinerías de Cadereyta y de Tampico (Ciudad Madero) por los altos niveles de contaminación.
“Para defender la vida tenemos que cerrar las refinerías de Cadereyta y Tampico. Para defender la verdad tenemos que reconocer que el calentamiento global es un hecho real. Donde no hay salud no puede haber libertad, donde no invierten en energías renovables, limpias y eficientes, no puede haber prosperidad”, argumentó Gálvez.
Aunque la candidata presidencial opositora garantizó que los trabajadores de ambas plantas no perderían su trabajo, ni sus derechos laborales ante el posible cierre.