Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), compareció la tarde de este viernes ante el Senado de la República, en busca de un segundo mandato.
Durante su aparición ante las comisiones de Derechos Humanos y de Justicia en la segunda jornada de comparecencias para presidir la CNDH, la funcionaria defendió el actuar de la Comisión, quien ha establecido un nuevo modelo de defensa que no sólo atiende quejas, sino también se enfoca en prevenir violaciones a las garantías individuales.
“Hoy la CNDH es otra. Dejó de ser la institución nacional de derechos humanos más onerosa y menos productiva del mundo como lo era antes de mi gestión. Hoy con menos aparato y menos presupuesto se trabaja en serio y los resultados son los mayores numéricamente en toda la historia de la CNDH”, expresó.
En ese sentido, Piedra Ibarra resaltó que “no aspiro a este puesto por mera ambición personal, sino porque lo veo como un medio necesario para consolidar lo logrado”.
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Según lo explicado por la funcionaria, el objetivo de mantenerse en el cargo es en busca de consolidar la transformación en la CNDH, además de construir un nuevo modelo de defensa de las víctimas y dejar atrás la institución creada por Carlos Salinas de Gortari.
Cabe señalar que, durante su comparecencia los ánimos se calentaron, luego de que el senador Ricardo Anaya la cuestionara sobre tres principales temas: legitimidad de su elección, militarización del país y la prisión preventiva oficiosa.
Anaya aseguró que “conscientemente asumió la presidencia de la CNDH sabiendo que su elección había sido fraudulenta”. Esto al conseguir 76 votos de un total de 116 sufragios, por lo cual, no reunió la mayoría calificada.
Trabajadores del PJF exigen que Rosario Piedra no se reelija
Es importante mencionar que la comparecencia de Rosario Piedra se llevó a cabo en medio de protestas a las afueras del Senado de la República, mismas que fueron encabezadas por trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF).
Los manifestantes aseguraron que la funcionaria “no tiene la calidad moral para estar allí”, por lo cual consideraron que su ratificación sería "un atentado a la libertad y a los derechos humanos".
“Reelegir a Piedra Ibarra significaría que volvería a imperar en la CNDH el amiguísimo y regresaría el oscurantismo", expresaron.
Rosario Piedra Ibarra es una de los 48 postulantes que buscan presidir la Comisión Nacional de Derechos Humanos, cuyos resultados serán dados a conocer el próximo 8 de noviembre.