Un video en las playas de Tijuana se viralizó al mostrar cómo un grupo de personas aprovechan un agujero en el muro fronterizo para cruzar de México a Estados Unidos, mientras el territorio nacional experimenta un crecimiento de personas migrantes en situación irregular por arriba del 50 por ciento.
De acuerdo con el Boletín Estadístico Migratorio del Gobierno Federal, hasta julio de 2023 se contabilizaron 317 mil 334 eventos de personas con una situación migratoria irregular, una cifra más alta que los 206 mil 468 casos reportados en el mismo periodo, pero de 2022 y equivalentes a un incremento del 54 por ciento.
Recientemente, la división férrea de Grupo México se vio obligado a detener 60 trenes de carga ante intensos flujos migratorios hacia el norte que equivaldrían a 1 mil 800 camiones de carga, además de que se ponía en riesgo tanto a los migrantes como a los conductores de las locomotoras.
Tan sólo de enero a julio del 2023, los eventos con migrantes registrados por el gobierno incrementaron 92 por ciento al pasar de 37 mil 643 a 72 mil 223. Mientras que de los más de 317 mil eventos migratorios, 224 mil 268 fueron presentados ante la autoridad y 93 mil 66 fueron canalizados a procedimientos administrativos migratorios.
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Durante las últimas semanas, cerca de 4 mil personas se congregaron diariamente en ambas fronteras del país. Al sur, lidiando con la Guardia Nacional y los cercos migratorios, mientras al norte se cuelan una y otra vez las imágenes de madres cruzando por debajo del alambre de púas o junto a las boyas en el Río Bravo colocadas por el gobernador de Texas, Gregg Abbott.
Los peligros de la migración
Las personas en transición se ven obligadas a avanzar largos trayectos desde sus países de origen para intentar alcanzar el “sueño americano”. De acuerdo con la Organización Internacional de la Migración, los riesgos que sufren los migrantes que vienen a México van más allá de la violencia tácita que existe en el país.
En el reporte “Migrantes en México-Vulnerabilidad y Riesgos” señala, por ejemplo, que el tráfico de personas pasó de los “coyotes y polleros” o el viaje en La Bestia a “redes empresariales complejas". Las personas en tránsito también sufren fuertes actos de discriminación, las mujeres y comunidades LGBT+ son víctimas de la violencia de género, mientras los delincuentes ven en estas poblaciones objetivos claros para las actividades que, de por sí, realizan en el país.
Además, los largos trayectos implican también fuertes peligros hidrometeorológicos, los desastres en el tránsito y la posible damnificación de los y las migrantes que atraviesan el país.