Pese a que en los últimos días los trenes han sido sinónimo de fiesta en el territorio nacional, debido a que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha dado el banderazo inicial o el visto bueno en varias obras ferroviarias como el Tren Interoceánico del Istmo o el Tren Maya, algunas ya existentes se han visto ensombrecidas por la migración masiva, pero ¿qué está pasando?
Desde hace mucho tiempo personas de origen extranjero llevan utilizando las vías ferroviarias para viajar desde el sur de México hasta la frontera con Estados Unidos a fin de cruzar de manera ilegal e iniciar una nueva vida en el país vecino.
Sin embargo, en los últimos meses se ha registrado un alto flujo de migrantes a suelo nacional, quienes utilizan trenes de carga como transporte para movilizarse hacia el territorio norteamericano.
Lo anterior llevó a que el pasado martes, Ferromex, la división férrea de Grupo México y propiedad del empresario Germán Larrea, paralizara las operaciones de un total de 60 trenes que cubrían las rutas hacia el norte de México ante la masiva aglomeración de migrantes.
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Dicha medida fue tomada por la compañía debido a que la operación de las rutas férreas implica un severo riesgo para los operadores de las locomotoras así como para los migrantes y sus familias pues en los últimos días se ha registrado cerca de media docena de casos de lesionados o fallecidos de personas que buscan abordar un tren para transportarse y llegar a la frontera norte.
No obstante, aunque la medida de Ferromex tiene el objetivo de salvaguardar la integridad de los operadores y personas de origen extranjero, ésta ha costado alrededor de 40 millones de pesos al día, estimó Lourdes Aranda, directora de Relaciones con Gobierno y Comunicación de Grupo México.
¿Por qué ha incrementado el flujo de migrantes?
Pese a que México siempre había sido utilizado por personas de Haití, El Salvador, Guatemala, Honduras, Venezuela, Cuba, entre otros, para llegar a Estados Unidos, en los últimos años se ha registrado un incremento en el flujo migratorio.
Esto se debe a las promesas que hizo el presidente López Obrador al inicio de su gobierno, quien ofreció protección, visa y empleo a migrantes centroamericanos.
Asimismo, el fin del Título 42, una política que permitía que el gobierno de Estados Unidos expulsara a los migrantes sin permitirles que solicitaran asilo, influyó en el aumento de la entrada ilegal de personas.
Tras el fin de esa política, la administración de Joe Biden habilitó la aplicación CBP One para que los migrantes realicen citas para solicitar asilo. Pese a ello, quienes buscan acceder de manera legal han reportado que presenta fallas, de acuerdo con el periodista de Grupo Fórmula Marco Silva.
A esto se suman los rumores que han circulado entre migrantes de que las autoridades estadounidenses han facilitado el cruce de la frontera.
Crisis migrante ‘desborda’ a EU
Por si fuera poco el alto flujo migratorio no sólo ha afectado a territorio mexicano, pues Estados Unidos también ha tenido que enfrentarse al incremento de migrantes, lo cual ha derivado en una crisis en El Paso, Texas.
Este miércoles las autoridades migratorias estadounidenses suspendieron temporalmente el procesamiento de vehículos y carga de trenes en uno de los accesos del paso internacional de Eagle Pass, Texas, para apoyar el proceso de los migrantes detenidos en la frontera.
De acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) necesitaban redireccionar a su personal para ayudar a la Patrulla Fronteriza a detener la afluencia masiva de migrantes. Y es que el promedio de detenciones aumentó de 969 diarios registrados en la primera semana de septiembre a mil 209 el pasado lunes.
Por ello, se tomó la decisión de cerrar el puente internacional en Texas a vehículos y el puente ferroviario que comunica Piedras Negras con Eagle Pass con el fin de contener la crisis migrante._ Con información de EFE y Los Angeles Times