El vicealmirante Carlos Velázquez Tiscareño, director general del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), aclaró que la reducción de operaciones en el aeródromo obedece a una sobresaturación de la terminal aérea capitalina que opera al 150 por ciento de su capacidad.
Durante una entrevista con Jaime Núñez para Radio Fórmula, el piloto aviador retirado detalló que la medida va de acuerdo con una recomendación de Protección Civil para evitar riesgos, por lo que se prevé que con la reducción de 52 a 43 operaciones por hora se alivie la saturación en terminales.
“Esto es una medida de buscar aliviar la saturación que sufre el aeropuerto en lo que se refiere a edificios terminales. Este aeropuerto ya no puede mantener de manera segura, cómoda y con certidumbre a tantas personas que están aquí todos los días a todas las horas”, dijo.
La medida entrará en vigor a partir del 29 de octubre y responde a un ordenamiento del Gobierno federal y una medida determinada el lunes por la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
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Cabe recordar que en marzo pasado, la AFAC estableció un tope de 52 aterrizajes y despegues por hora además de prohibir la apertura de nuevas rutas desde el aeropuerto Benito Juárez; sin embargo, Velázquez Tiscareño consideró que dicha acción no fue suficiente para aliviar la saturación del aeródromo, motivo por el cual, se tomó la decisión de implementar una nueva restricción.
“Tomé una decisión para evitar los vuelos ilegales, esa medida nos alivió un poco la saturación de un par de millones de personas al año, pero sigue sin ser suficiente y ahora volví a solicitar un estudio de saturación, salimos todavía en la franja de inseguridad”, detalló.
Y es que de acuerdo con el vicealmirante, las aerolíneas metieron aviones más grandes, de tal forma que el problema no se corrigió, al contrario, empeoró este año.
Por lo anterior, es que la AFAC y el director general del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México determinó implementar una reducción de 52 a 43 operaciones por hora, cuya medida es temporal y estará vigente desde el inicio de la temporada de invierno y se mantendrá en las siguientes temporadas “en el caso de que persistan las condiciones de sobresaturación”.
Asimismo, aprovechó la oportunidad para señalar que las acciones son pensadas en el bienestar y la seguridad de los pasajeros y trabajadores del AICM, por lo que su objetivo nunca es perjudicarlos.
“Nuestra misión es mantener la seguridad y esto no puede mantenerse si se siguen conservando estos niveles ya peligrosos de saturación (…) todas las medidas son en pro del beneficio y la seguridad de los usuarios, nunca es para afectarlos”, añadió el vicealmirante Carlos Velázquez Tiscareño.