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ELECCIONES EDOMEX

La década perdida del PRI: El tricolor suma 18 derrotas en los estados desde 2013

Este 4 de junio se llevarán a cabo las elecciones a la gubernatura de Coahuila y Estado de México, esté último como el bastión más importante del PRI en México.

El PRI lleva una década de derrotas en que ha perdido 18 gubernaturas. Créditos: Daniela Mena / Grupo Fórmula
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La derrota del PRI en el Estado de México en las elecciones del 4 de junio marcó el final de 94 años del tricolor al frente de la entidad más poblada del país. Pero también será la consumación de una derrota monumental en que el "Partido de México" se quedó con apenas dos gubernaturas y sólo un bastión: Coahuila.

Frente al poder que ostentaba en 2012, cuando ganó las elecciones presidenciales con Enrique Peña Nieto, el PRI pasó de gobernar 20 entidades a apenas dos, mientras que su rival, Morena, pasó de apenas obtener el registro en 2014 a gobernar en 21 entidades y contar con dos mandatarios estatales aliados de la 4T. 

El Edomex: el bastión político del PRI

Hasta este domingo, el Estado de México siempre representó uno de los bastiones más importantes del PRI. La entidad más poblada de México es además de gran relevancia económica por su actividad industrial, en sectores como el automotor, alimentario, químico-farmacéutico, textil y turístico. 

Por primera vez en la historia, el Estado de México será gobernado por una mujer. Hasta ahora todos los gobernadores fueron hombres, todos del PRI, con una tradición que inició cuando el grupo político aún llevaba el nombre de Partido Nacional Revolucionario (PNR) y el Grupo Atlacomulco comenzaba a gestarse. 

Alejandra del Moral, candidata del PRI Foto: Especial

En los últimos 10 años, los tentáculos del partido tricolor han comenzado a encogerse. En 2013, tras ganar las elecciones de 2012, el PRI gobernaba cómodamente 20 entidades del país, y su aliado, el Partido Verde, le aportaba un gobierno afín. 

Para 2016, el PRI cedió 5 entidades, mientras que tras las elecciones de 2018, se quedó con 12.

Pero en las elecciones de 2021 vino la gran derrota del tricolor. El PRI no ganó una sola gubernatura, en cambio perdió ocho: Sinaloa, Tlaxcala, Sonora, Colima, Zacatecas, Guerrero y Campeche pasaron a manos de Morena. Su saldo tras los comicios intermedios del sexenio de AMLO fue quedarse con sólo 4 gubernaturas. Y en 2022 perdió una más. Y tras las elecciones de 2023, el PRI sólo tiene dos entidades: Coahuila y Durango.

Ascenso y ¿caída? del PRI: el Grupo Atlacomulco

De 2015 a la fecha, el PRI ha perdido más de una decena de gubernaturas, por lo que perder el Estado de México implica quedarse sin la gubernatura más importante del partido y tener sólo dos a nivel nacional.

Delfina Gómez buscó la gubernatura del Edomex en 2017

El Grupo Atlacomulco fue conocido por ser una élite de militancia política del PRI en la que no cabía la democratización política del estado. Sin embargo, las versiones más aceptadas de su origen señalan que surgió en 1942, cuando Manuel Ávila Camacho, priista también, invitó a Isidro Fabela a ser gobernador de la entidad para “desvanecer conflictos locales”

El jurista Juan Carlos Villareal Martínez asegura que con Fabela en el poder ayudó a poderosas familias de Atlacomulco. 

“Apellidos como Del Mazo, Sánchez Colín, Monroy, Montiel, Hank y Peña Nieto lograron incursionar en la política y en los negocios gracias a dos factores: pertenecer al mismo lugar de origen y compartir lazos consanguíneos”, señala en “La élite priista mexiquense: el estado del arte actual”. 

Esta facción priista se volvió una de las más poderosas y míticas en el partido. Como fundador estuvo Isidro Fabela, acompañado de Alfredo del Mazo Vélez, Carlos Hank González, Alfredo del Mazo González, Ignacio Pichardo y Emilio Chuayffet.

Aunque más recientemente se incluyeron los nombres de Arturo Montiel Rojas, Alfredo del Mazo Maza y Enrique Peña Nieto, quien no sólo fue gobernador del Estado de México, si no que también ganó la presidencia en un regreso a Los Pinos que duró únicamente un sexenio. 

En los últimos años, la oposición encabezada principalmente por Morena, ha comenzado a ganar terreno, mientras el PRI busca mantenerse como la principal fuerza política de oposición. Pero la derrota de este domingo lo pone contra la lona y lo deja en vías de extinción.