Los ocho militares detenidos por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa se negaron a declarar ante la juez federal Raquel Ivette Duarte Cedillo durante su proceso legal.
Los elementos militares fueron detenidos el pasado 21 de junio y trasladados al Campo Militar Número 1 para responder por las acusaciones en su contra que los identifican como partícipes del ataque y desaparición de los jóvenes normalistas en septiembre de 2014.
“Los militares que entregaron no están colaborando, como si actuaran por una instrucción que recibieron”, informó Juan Angulo, director del periódico el Sur en entrevista para "Atando Cabos"
Incluso, durante la audiencia los elementos del Ejército solicitaron ampliar el plazo a 144 horas para dictaminar su situación jurídica. “No ha habido poder alguno que obligue a la Secretaría de la Defensa Nacional a dar los datos que tiene”, dijo el comunicador.
Te podría interesar
Sedena y los secretos del caso Ayotzinapa
En medio de esta ola de negativas , el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) anunció que abandonaría el caso por la constante opacidad del gobierno para entregar datos y documentos.
“Ellos tienen pruebas de que el Ejército tomó declaración a prácticamente todos los que se encontraban en el batallón 27 y el 31 la noche-madrugada de los hechos y estas conversaciones nunca las quisieron dar a conocer”, detalló Angulo.
Al anunciar su partida para julio, el GIEI precisó haber tenido fuertes diferencias con la Sedena por el caso Ayotzinapa dado que deliberadamente se ocultaba información vital para la investigación y el esclarecimiento del la desaparición. Angulo explicó que éste ha sido un golpe fuerte para las familias de los 43 normalisque, quienes hasta hoy buscan justicia para este crimen.