El diputado federal con licencia Gerardo Fernández Noroña busca “ser la sorpresa” entre las ‘corcholatas’ de Morena y sus aliados, y ganar la contienda por la candidatura presidencial para las elecciones del 2024, misma que también se disputan Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López, Manuel Velasco y Ricardo Monreal.
Fernández Noroña renunció esta semana a su cargo para registrarse como aspirante a coordinador de la Defensa de la Cuarta Transformación, proceso que –en caso de resultar favorable para él- lo llevaría a aparecer en la boleta el 2 de junio del 2024.
¿Quién es Fernández Noroña?
Nació el 19 de marzo de 1960 en la Ciudad de México, fue criado por su abuela materna y por su madre, quien fue la encargada de sacar adelante a cinco hijos, dos mujeres y tres hombres.
El político es el hijo de mayor, quien desde muy pequeño vivió en el municipio de Tlalnepantla, Estado de México, lugar donde permaneció desde los cinco y hasta los 23 años.
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“Yo nací en la Guerrero, en la Clínica Prensa, era una clínica privada porque mi mamá no tenía seguridad social, no por otra cosa, era costurera. Una clínica pedorrísima, ahí está todavía, muy modesta. Nací en la Guerrero, viví en el DF y luego me llevaron a Tlalnepantla, ahí hice carrera política", relató.
Noroña es licenciado en Sociología por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) en el campus Azcapotzalco, institución donde obtuvo la mayor influencia en la política y su formación en la izquierda mexicana.
Sin embargo, aunque tuvo la oportunidad de ser un estudiante destacado, nunca le gustó la escuela e incluso ha sostenido que es necesario “cambiar el sistema educativo”, pues es “aburrido y autoritario”.
Su primer trabajo y su pasión por la lectura
Gerardo Fernández puede presumir de tener una larga carrera en la política, cuyo interés inició desde muy joven, pues fue líder en su preparatoria en un Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (Cecyt), también fue representante de su carrera en la universidad y hasta dirigente en la colonia donde vivía.
No obstante, para poder aspirar a un cargo público tuvo que ganarse la vida desde abajo, por lo que su primer empleo lo obtuvo a los 15 años de edad y fue como repartidor de volantes de la agencia de autos Renault, ubicada en Cuautitlán Izcalli.
Así como su gran amor es la política también lo es por la lectura, en especial disfruta aquellos que tratan de historia y literatura, lo que le ha llevado a coleccionar una inmensa cantidad de libros en su casa e incluso ha tenido que prescindir de ellos, mismos que ha venido o regalado a las afueras de su domicilio.
También disfruta de algunos deportes como el futbol americano, el cual practicó durante siete años desde los 14, jugando como ala defensiva. Su equipo favorito fueron los Vaqueros de Dallas, en tanto que en el futbol soccer fue el América.
Respecto a sus pasatiempos favoritos son viajar, ir al cine y, por supuesto, leer. La música que más disfruta es el rock, blues, la nueva trova cubana y la música mexicana, en especial es un gran aficionado de la voz de José Alfredo Jiménez.
Así creció en la política
Antes de incursionar de lleno en el mundo de la política trabajó en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de 1983 a 1990. Fue hasta 1988 cuando consiguió su primer cargo como diputado federal por el Partido Mexicano Socialista y después se unió al Frente Democrático Nacional (DFN), antes de que se convirtiera en el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En 1995 encabezó la creación de la Asamblea Ciudadana en Defensa de los Deudores de la Banca, organización que defendía a quienes debido a la crisis económica sufrida ese año en México, habían visto multiplicarse sus deudas por sus créditos bancarios.
Fue así como encabezó una serie de protestas que lo harían posteriormente reconocido, entre ellas una en 1996 en Cancún frente al entonces presidente Ernesto Zedillo, lo cual le costó que fue encarcelado hasta que fue liberado tras la intervención del entonces presidente nacional del PRD, Andrés Manuel López Obrador.
De la mano del PRD fue fundador del movimiento de bases insurgentes (Mobi), así como secretario de comunicación, difusión y propaganda del Congreso Nacional del Partido (CEN).
Sería hasta el 2008 cuando renunciaría al Partido de la Revolución Democrática como protesta de que Alejando Encinas no fue electo como dirigente del partido.
Un año después se convertiría en diputado federal en la LXI Legislatura por el Distrito 9, correspondiente a Iztapalapa de la mano del Partido del Trabajo (PT).
Mientras que en 2015 fue candidato del PT a diputado federal por la vía plurinominal, pero su partido no alcanzó los votos necesarios para llegar a la Cámara de Diputados.
Fernández Noroña no se rindió y en 2018 contendió para una diputación federal por el Distrito 4 de Iztapalapa, en la Ciudad de México, cargo que ocupó hasta el 2021; sin embargo, consiguió la reelección en San Lázaro por el mismo distrito, por lo que consiguió permanecer hasta 2024.
Cabe señalar que en 2016 tomó la decisión de postularse como candidato a la Presidencia de la República, pero al año siguiente decidió declinar en favor del ahora presidente López Obrador.
Pero dicho objetivo no lo ha quitado de su camino, por lo que el pasado 13 de junio Gerardo Fernández Noroña solicitó licencia para poder participar en la contienda interna de Morena para elegir al candidato a la presidencia de México en el 2024.