El subsecretario de Salud Hugo López-Gatell está en la mira y el abogado Javier Coello Trejo busca que la justicia mexicana lo sancione por lo que considera su responsabilidad en las muertes por COVID-19 durante la crisis sanitaria.
Y aunque, como consideró el periodista Ciro Gómez Leyva, parece impensable que las autoridades de México lo vayan a procesar, para el litigante la justicia se puede alcanzar mientras sea posible.
El miércoles se dio a conocer que un juez pidió a la Fiscalía General de la República (FGR) tiene que continuar con las indagatorias en contra del subsecretario de Salud, a quien se le denunció por omisiones en la muerte de Felipe del Carmen Jiménez Pérez, familiar de un colaborador de Coello Trejo.
De acuerdo con el abogado, la responsabilidad de la que se señala a López-Gatell es por homicidio culposo por omisión, ante ciertas negligencias y omisiones que cometió en la gestión de la pandemia de COVID-19.
Te podría interesar
Los errores de López-Gatell que podrían llevarlo ante la justicia
Según el abogado Coello Trejo, en una conferencia el propio Hugo López-Gatell reconoció que hubo errores en la forma en que se enfrentó a la pandemia, que cobró al menos 330 mil vidas según cifras oficiales, pero que según cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), esa cifra podría duplicarse en las muertes entre 2020 y 2021.
Al respecto, el despacho de Coello Trejo consideró que los errores por los que se puede responsabilizar a López-Gatell de esa y otras muertes durante la pandemia de COVID-19 son:
- El uso del cubrebocas. En repetidas ocasiones, el subsecretario de Salud refirió que si bien el cubrebocas era recomendable para prevenir contagios, en ningún momento a lo largo de la crisis sanitaria en México se ordenó su uso como una obligación.
Incluso, al inicio de la contingencia sanitaria, se dieron algunas recomendaciones arriesgadas, como la sustitución del uso del cubrebocas por un pañuelo de papel y unas ligas para tapar el área de la nariz y la boca.
En 2022, López-Gatell reconoció que el gobierno no declararía el fin del uso obligatorio del cubrebocas porque en ningún momento se tomó esa medida, como sí ocurrió en otros países.
- El cierre de fronteras: Mientras muchos países en el mundo restringieron la entrada a sus tierras sólo a sus ciudadanos y residentes y hasta la condicionaron a la presentación de pruebas negativas de COVID-19, en México no se aplicaron medidas análogas.
De hecho, durante la primera parte de la crisis sanitaria a mediados de 2020, las fronteras de México se mantenían abiertas a los visitantes extranjeros que aún estuvieran interesados en viajar.
- La restricción del ingreso de personas sin vacuas: Cuando las vacunas contra el COVID-19 empezaron a circular en diciembre de 2020, muchos países empezaron a poner como nueva condición que las personas que los visitaran contaran con un esquema completo de vacunación.
Sin embargo, en México no se impusieron medidas para frenar la llegada de personas desde el extranjero en plena ola de contagios de COVID-19.
- El transporte público se mantuvo como actividad esencial. La persona por cuya muerte se denunció a López-Gatell se dedicaba al transporte público, lo que derivó en que esa persona continuara su exposición al virus durante las primeras tres olas de COVID-19.
"Si bien, el ministerio público habla de un acuerdo que se publicó en el Diario Oficial de la Federación respecto a limitar ciertas actividades administrativas, escolares y de otra índole, donde en sectores administrativos públicos y privados se limitaban varias actividades, pero refirió que ciertas actividades esenciales para la economía del país no cesaron; y que una de ellas fue el transporte público de pasajeros que su padre a eso se dedicaba y esa actividad no fue suspendida", refirió el equipo de Coello Trejo.
Según el despacho de Coello Trejo, el propio juez reconoció la responsabilidad de Hugo López-Gatell está en el delito de homicidio por omisión, pues incumplió con sus funciones para prevenir el impacto del COVID-19 en las personas.
En la resolución del juez se considera que el subsecretario Hugo López-Gatell era el vocero del gobierno federal, en quien recayó la responsabilidad y a través de los mensajes que se dirigían a la población en general marcaban las diversas acciones a seguir así como las recomendaciones, que incluso la Organización Mundial de la Salud enviaba a los países a propósito del COVID-19.