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PERFIL: ¿Quién fue Juan Pablo Adame, el senador que murió de cáncer?

Juan Pablo Adame murió a la edad de 38 años tras padecer cáncer de estómago.

El senador suplente Juan Pablo Adame murió a los 38 años de cáncer de estómago. Créditos: Cuartoscuro
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El día de hoy se dio a conocer el senador suplente Juan Pablo Adame murió a causa de cáncer a los 38 años de edad, pero ¿quién fue él y cuál fue su trayectoria política? Te contamos. 

El fallecimiento del político fue confirmado por su padre, el exgobernador de Morelos Marco Adame, en sus redes sociales. 

"Con profundo dolor y esperanza en la vida eterna, unido a su familia, a mi esposa y a mis hijos les comparto que mi hijo Juan Pablo Adame descansa en paz", escribió el exmandatario.

Pablo Adame padecía de cáncer de estómago desde el año 2022, pero no fue sino hasta el mes pasado que se dio a conocer que recibía cuidados paliativos debido a la enfermedad. 

¿Cuál fue la experiencia política de Juan Pablo Adame?

Juan Pablo Adame, senador suplente de Miguel Ángel Mancera, fue un político panista que ya se había desempeñado como diputado durante la LXII legislatura (del 2012 al 2015). 

Tenía poco más de 15 años de experiencia política, pues del 2006 al 2009 fue encargado de las relaciones internacionales del grupo parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados y posteriormente fue consejero en la Comisión de Juventud y deporte en el mismo recinto legislativo. 

Pablo Adame también se desempeñó en otros puestos dentro del Acción Nacional en Cuernavaca y a nivel nacional, como coordinador de formación de jóvenes del PAN en Cuernavaca y capacitador nacional del mismo partido. 

En su formación académica contaba con una licenciatura en Relaciones Internacionales por el Tecnológico de Monterrey y una Maestría en Gobierno y Políticas Públicas

Un vaso de agua fría, la carta que envió Juan Pablo Adame

Luego de que se informara que Juan Pablo Adame entró a cuidados paliativos, la senadora Josefina Vázquez Mota compartió el texto Un vaso de agua fría que tiene por objetivo es invitar a las personas a disfrutar de la vida. El texto completo es el siguiente: 

Un vaso de agua fría

Ver el vaso lleno, tomarlo y pasarlo por tu boca, sentir cómo se activan tus papilas de inicio a fin, que el agua pase por tu garganta y dejar de tener sed. Una sensación única, un placer tan grande. Llevo más de un mes sin poder gozar de ese vaso de agua fría, mi cuerpo se ha ido deteriorando y por la enfermedad he perdido gustos tan simples y tan básicos como el tomar un buen vaso de agua fría.

Gracias a estos momentos hoy valoro lo simple y lo cotidiano como algo extraordinario y te invito a hacer lo mismo: a que no des por sentado las cosas que haces cada día, te invito a que encuentres en cada acción lo maravilloso que es la vida y el regalo que significa disfrutar todos los pequeños detalles.

Hoy entro a una nueva etapa de mi vida: mis oncólogos han sido muy generosos conmigo, han puesto lo mejor de sí para curarme hasta este momento pero el cáncer no dio tregua. Toca entrar a cuidados paliativos, decidimos tomarlos desde casa, es espacio de amor y seguridad que hemos construido Eli y yo desde nuestro matrimonio. Sé que me acompañarán con sus oraciones, pensamientos y con todo el amor que me han dado hasta el día de hoy a mí, a Eli, a María, a Rodrigo y a Inés.

Estoy muy en paz, con la tranquilidad y seguridad que Dios está conmigo, que no estoy solo. Sigo disfrutando la vida como un regalo diario. Hoy sólo asumo esta nueva situación de mi vida con la seguridad de que el cielo me espera, pero no seré yo ni las expectativas de vida que me han dado los doctores, los que tienen la última palabra. Dios sabrá el día y la hora, mientras tanto a vivir; disfruten de un buen vaso de agua fría.

Con amor, Juan Pablo Adame Alemán.