Han pasado más de ocho días del impacto del huracán "Otis" en Acapulco, Guerrero, y conforme avanza el tiempo parecen ser más los problemas que afloran que las soluciones, que si bien se están implementando ante la catástrofe, esta parece fluir a cuentagotas.
Así lo reportó Israel Aldave, quien es enviado de Grupo Fórmula a la costa, donde informó que ha regresado el uso de cubrebocas entre los acapulqueños, pero por el intenso olor a basura y putrefacción en diversas zonas del puerto.
"Ahora lo fuertes olores que despiden los cúmulos de basura y que se encuentran a lo largo y ancho de todo el puerto. Los habitantes denuncian que desde la semana pasada los servicios de limpia ha realizado su labor de retirar los escombros", dijo.
Tal es la intensidad del olor a basura, que muchos habitantes de Acapulco han decidio abandonar el puerto y dirigrse a otras localidades para evitar las náuseas que les generan el contacto con los desperdicios, que en algunos casos no sólo son por alimentos en descomposición, sino también por algunos animales.
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Ante este caso, los guerrerenses han solicitado que la Secretaría de Salud (SSa) realice fumigaciones a fin de evitar la propagación de enfermedades y una potencias emergencia sanitaria en Acapulco.
"Los encharcamientos han motivado la proliferación de mosquitos y esto a su vez, han advertido los habitantes, pueden ser portadores de enfermedades como el dengue", narró el reportero al noticiero de Joaquín López-Dóriga.
En tanto, en el mismo reporte con Joaquín López-Dóriga, Héctor Herrera, expuso que aunque hay esfuerzos porque se recobre la energía eléctrica, esta sólo ha podido ser reconectada en un 50 por ciento en el puerto por lo que se ha retrasado el suministro de agua y otros servicios.
Esta misma situación ha generado que el internet y la señal telefónica sea intermitente en diversos puntos del puerto.