El dirigente del Partido Verde en la Ciudad de México, Jesús Sesma, hizo hincapié en los riesgos para la salud y el medio ambiente asociados a la contaminación lumínica, instando a las autoridades y ciudadanos a ser precavidos con el exceso de iluminación, especialmente en áreas naturales y lugares de reposo en la capital.
Sesma, político ecologista, recordó que estudios médicos han vinculado la contaminación lumínica con un aumento en el riesgo de ciertos tipos de cáncer, como el de mama, próstata y colorrectal, especialmente en personas expuestas de manera repetida y prolongada a la luz excesiva, como es el caso de quienes trabajan en turnos nocturnos.
Impactos ambientales
En cuanto a sus impactos ambientales, subrayó que aproximadamente el 50 por ciento de la iluminación se utiliza innecesariamente, lo que representa un derroche de energía. Además, señaló que la contaminación generada por el alumbrado exterior afecta la actividad de especies nocturnas, como los insectos, cuya posición crucial en la cadena alimentaria puede perturbar por completo cualquier ecosistema.
El legislador local del Partido Verde en la Ciudad de México destacó un logro ambiental significativo este año al reformar la Ley Ambiental de Protección a la Tierra en la Ciudad de México. Estas modificaciones son esenciales y urgentes en una ciudad que emite una de las mayores cantidades de luz artificial en el mundo.
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¿Qué es la contaminación lumínica?
El Partido Verde explicó que "la ley establece que por contaminación lumínica, se entiende como el exceso de flujo lumínico, iluminación o resplandor luminoso en ambientes nocturnos o brillo producido por la difusión y reflexión de la luz en los gases, aerosoles y partículas en suspensión en la atmósfera, provenientes de fuentes artificiales, con intensidades, direcciones o rangos espectrales inadecuados para la realización de las actividades previstas en la zona alumbrada, misma que altera las condiciones naturales de luminosidad en horas nocturnas, provocando afectación a los patrones de descanso o condiciones de molestia en las personas sometidas al campo luminoso producido por las fuentes emisoras".
Finalmente, Jesús Sesma destacó que con las reformas, se garantiza la eficiencia energética en el alumbrado público, se preservan las condiciones naturales de las noches en áreas de conservación y se previene, minimiza y controla la contaminación lumínica, evitando la intrusión lumínica.