La devastación en Acapulco por el huracán “Otis” ha dejado a miles de familias sin conectividad, electricidad y los insumos básicos de vivienda. Este fenómeno natural tocó tierra en México como huracán categoría 5 el pasado 25 de octubre, mientras el Servicio de Gestión de Emergencias de Copernicus estima que 6 mil 200 hectáreas urbanas resultaron dañadas.
Además de éstas cifras Copernicus recalcó que la llegada de “Otis” con vientos de 270 kilómetros por hora (Km/h), “provocó inundaciones y deslizamientos de tierra que provocaron evacuaciones y graves daños”.
Tan sólo el 26 de octubre, el paso del huracán provocó la evacuación de 34 mil 522 familias, que fueron movilizadas a 631 refugios temporales, señaló el Servicio citando a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Copernicus presentó un mapa donde se expone que aunque la bahía de Acapulco resultó fuertemente dañada, fue unos kilómetros más atrás donde hubo una intensa destrucción.
Te podría interesar
Hasta el momento, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, reportó 45 personas fallecidas y 47 desaparecidos por el huracán, cifras que difieren con las presentada por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, la cual dio a conocer que 48 personas habían fallecido tan sólo un día antes.
El mapa de los daños de Otis
Copernicus además estimó 1 mil 394 edificios residenciales destruidos, 2 mil 264 dañados y 162 con posibles daños de los 4 mil 222 registrados. Por otro lado, de las edificaciones no residenciales 47 quedaron destruidas, 404.3 dañadas y 13.5 con posibles daños.
Las autoridades mexicanas informaron de varios daños provocados por ‘Otis’. Entre ellos se contabilizaron seis cierres carreteros, uno en la autopista México-Acapulco y otros cinco en la carretera federal Chilpancingo-Acapulco, daños en dos hospitales el Regional No.1 de Acapulco y el General Renacimiento.
En cuanto al sector eléctrico, un total de 504 mil usuarios se quedaron sin suministro de energía eléctrica, del que este 30 de octubre quedó resuelto en un 65 por ciento, mientras el sector hotelero resultó dañado en un 80 por ciento de su cobertura.