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La tragedia de Acapulco: de paraíso de clase alta… a tierra del narco y zona de desastre

El huracán Otis convirtió al puerto de Acapulco en una zona de desastre, muy lejos del esplendor que tuvo en antaño.

La tragedia de Acapulco: de paraíso de clase alta… a tierra del narco y zona de desastreCréditos: Cuartoscuro/Especial
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Vientos de hasta 330 kilómetros por hora, marejada ciclónica que en algunos puntos alcanzó los cinco metros de altura y lluvias torrenciales fue lo que vivió Acapulco, Guerrero, tras el impacto del huracán Otis que alcanzó la categoría 5. Ahora, el puerto es zona de desastre y se encuentra muy lejos del esplendor que vivió hace algunas décadas cuando fue un destino de talla internacional.

A los daños que dejó el huracán Otis se suma la violencia que ensombrece a Acapulco, donde organizaciones delictivas se disputan el comercio de sustancias ilícitas; además de que estos grupos suelen realizar narcobloqueos con vehículos quemados. Incluso, turistas han sido asesinados a causa de estos enfrentamientos.

¿Cómo era Acapulco cuando fue un paraíso de la clase alta?

El puerto de Acapulco ha sido de vital importancia para México a lo largo de su historia: en la época colonial fue el sitio donde atracó la Nao de China (o Galeón de Manila), un buque que permitió el comercio con el Lejano Oriente. Pero fue a partir de los años 50 del siglo pasado que se convirtió en un destino turístico reconocido en todo el mundo.

A pesar de que la carretera México-Acapulco se construyó durante la década de los años 20 del siglo XX, fue hasta la década de los 50 cuando empezó el boom del puerto y que lo llevó a ser considerado 'La Perla del Pacífico'. En el puerto empezaron a edificarse varios hoteles -el Holiday Inn llegó desde 1940-, a la par de que se inauguró el Aeropuerto Internacional de Acapulco en 1952.

El Aeropuerto de Acapulco en 1952 (FB: ICA)

Hubo un par de factores que detonaron el auge del turismo en Acapulco: la cercanía que tenía del entonces Distrito Federal y las facilidades de acceso de turistas extranjeros, "la mayor capacidad de los nuevos aviones y las facilidades otorgadas para las líneas aéreas internacionales impulsaron el turismo masivo entre 1955 y 1964", refiere Juan Manuel Ramírez Sáiz en el artículo 'Turismo y medio ambiente. el caso Acapulco' para el Colegio de México (Colmex).

Acapulco se convirtió en destino para líderes de Estado y hasta sitio de reunión del jet set internacional, por ejemplo, John F. Kennedy, quien fue presidente de los Estados Unidos entre 1961 y 1963, tuvo su luna de miel en el puerto durante 1952. Famosos como Elizabeth Taylor, Elvis Presley, Rita Hayworth y Ronald Reagan -quien sería presidente de  EU en los 80- también se maravillaron con la bahía mexicana.

Los Kennedy durante su visita a Acapulco (Especial)

Para 1960 , Acapulco llegó a recibir 540 mil 100 turistas entre nacionales y extranjeros, convirtiéndose en uno de los mayores destinos de Latinoamérica y el mundo; para 1972, esa cifra llegaría a los 1.5 millones, refiere Ramírez Sáiz. Llegaron a operar aerolíneas como American Airlines,Canadian Pacific, Transworld Airlines, entre otras.

A inicios de los años 70, 'La perla del Pacífico' seguía radiante y fue visitada por dos integrantes de The Beatles: George Harrison y Ringo Star; en aquel entonces, la capacidad hotelera se estimaba en 7 mil 685 cuartos. El deterioro del poder adquisitivo de las y los mexicanos, así como la contaminación de la bahía, causaron que el turismo empezara a menguar desde mediados de los 70... pero aún así se conservó como un destino importante para famosos como Luis Miguel y hasta Michael Jordan.

Ringo Star durante si visita a Acapulco a inicios de los 70 (Especial)

¿Por qué Acapulco se convirtió en una tierra del narco?

Un factor hizo que Acapulco y todo México se convirtieran en tierra fértil para los grupos dedicados al tráfico de drogas: Estados Unidos empezó a cortar las rutas y establecer políticas punitivas contra los cárteles colombianos que llevaban la droga desde Sudamérica hasta Miami por el Océano Atlántico.  Fue ahí cuando Acapulco empezó a ser un punto estratégico para el trasiego de sustancias ilícitas.

Este factor se sumó a una inadecuada planeación urbana que no sólo generó contaminación, sino en la falta de acceso a servicios básicos (drenaje, alumbrado, vigilancia, recolección de basura) para gran parte de la población, lo que a su vez detonó pobreza, exclusión e inseguridad, afirma Rodrigo Peña en su artículo 'La ciudad de Acapulco. Análisis de los caminos de la violencia y crimen en México'.

Acapulco desarrolló su industria turística en medio de una gran desigualdad (Cuartoscuro)

Valiéndose de la posición geográfica de Acapulco, que tenía conectividad por carretera con la mayor parte del Estado de Guerrero y la Ciudad de México, así como las condiciones de pobreza y desigualdad, a partir de la década de los 90, el puerto empezó a convertirse en un hot spot (punto caliente), donde empezaron a incrementarse los índices delictivos.En 1991 sólo hubo 80 homicidios y para 2012 fueron mil 276, refiere Rodrigo Peña.

A causa del aumento del tráfico de sustancias ilícitas y la llamada 'guerra contra el narco', Acapulco experimentó un aumento en sus índices de criminalidad: hubo 438 homicidios dolosos en 2020, 442 en 2021 y 437 en 2022, una tendencia que lo ha llevado a estar dentro de los 10 municipios más violentos de México. Para 2023 fue considerada la segunda ciudad más violenta del mundo, según datos de Statista.

Acapulco es uno de los municipios más violentos del país (Cuartoscuro)

Para 2022, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Guerrero identificó al menos tres cárteles que se disputan el control del puerto: Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cártel de Sinaloa -a través de su brazo armado conocido como 'Los Rusos'- y el Cártel Independiente de Acapulco (CIDA), quienes son generadores de violencia y responsables de otros delitos como: secuestro, extorsión y robo.

Junto al predominio del narcotráfico, Acapulco ha sido afectada por numerosos fenómenos naturales: en 1998, el huracán Paulina dejó más de 300 muertos y daños por mil 400 millones de pesos, los terremotos de 2017 y 2021, así como el reciente huracán Otis, que hasta hora ha causado una muerte y cuantiosos años materiales.