Ovidio Guzmán, uno de los líderes del Cártel de Sinaloa, quien fue detenido el pasado 5 de enero, logró frenar su extradición a Estados Unidos un día después de su captura. No obstante, aún prevalecen las incógnitas sobre si el gobierno vecino influyó en las investigaciones, como señala la periodista Anabel Hernández.
El secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval señaló en la conferencia matutina de este viernes que fueron “actividades de inteligencia estratégica” las que identificaron cuáles eran los espacios de acción de “El Ratón”, sin precisar si fueron nacionales e internacionales.
“Estados Unidos estuvo mandando información que consistía en coordenadas y transcripciones (de llamadas) entre miembros del Cártel de Sinaloa, uno de ellos que tenía contacto directo con Ovidio Guzmán Lopez”, dijo a Radio Fórmula en entrevista con Óscar Mario Beteta.
Sobre esto, Anabel Hernández, autora del libro “Los señores del narco” aseguró que cuenta con informes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) que registran el apoyo de Estados Unidos en las investigaciones desde agosto de 2022.
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Agregó que esta información es de interés, pues “Ovidio Guzmán era sólo un pequeño integrante” del brazo armado del Cártel de Sinaloa. Por otro lado, recordó que la orden por la que aprehendieron al hijo del “Chapo” venía del país vecino y es la única reportada hasta el momento por las autoridades.
La acusación contra Ovidio Guzmán
“No tiene acusación criminal, no hay un expediente abierto en la Fiscalía General de la República (FGR) por los delitos cometidos por ‘Los Chapitos’”, recalcó la periodista.
“No tiene Ovidio un expediente criminal, una acusación criminal en México. Las acusaciones que tiene, la recompensa que se tiene por ellos es en Estados Unidos no en México.
Por otra parte, el gobierno mexicano ha dado a conocer que existen elementos suficientes para llevar a Ovidio Guzmán ante los tribunales por delitos relacionados a la delincuencia organizada. Es así que el secretario de Defensa informó que sus áreas de actividad fueron identificadas por el tráfico de fentanilo y metanfetaminas.
La periodista mexicana también destacó que este fue un operativo “muy cerrado, impulsado de manera muy importante por el gobierno de Estados Unidos” y su información de inteligencia.
“Pareciera que la diferencia entre el operativo donde se liberó a Ovidio (Guzmán) y el actual operativo es que el presidente no llamó para que lo liberaran”, concluyó.