“Carolina” quería aumentar el volumen de sus labios y decidió acudir a una clínica de cirugías plásticas para que le pusieran ácido hialurónico, pero en ese momento y sin que se diera cuenta le inyectaron biopolímeros.
Ella no es la única persona a la que han engañado; a nivel nacional varias mujeres, como la actriz Manelyk, que buscaban hacerse un procedimiento estético o cirugía plástica, han relatado que les pusieron sustancias similares, a pesar de que son ilegales. El error de "Carolina" fue creer que al tratarse de una persona recomendada, todo saldría bien.
“No me explicaron mucho; me dieron una hoja de consentimiento; me pasaron a la camilla, conversamos para aclarar cómo quería los labios y empezaron, pero nunca me enseñaron lo que me aplicarían”, contó a Grupo Fórmula.
El documento de consentimiento decía que le iban a aplicar ácido hialurónico, no otra sustancia. Los resultados no fueron los que ella esperaba, tampoco sabía que existían los biopolímeros y las consecuencias que podían generar en su cuerpo.
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Durante 1 año y medio estuvo bien, pero después de ese tiempo empezó a presentar molestias porque perdió la definición que tenía, se le inflamaron algunas zonas del labio y le dolían con frecuencia.
“Conocidos me comenzaron a platicar de casos de otras chicas que les habían inyectado otras cosas en los labios que no era ácido hialurónico y, conforme pasó el tiempo, [los labios] se me empezaron a hacer como los videos que me enseñaban y las reseñas”, recordó.
Así que tuvo que buscar a un cirujano plástico certificado para que la revisara y le extrajera los biopolímeros. El doctor le indicó que el ácido hialurónico se absorbe en un periodo máximo de 6 meses y que no era normal que presentara dolor, sensibilidad o mal aspecto.
Para retirarlos, le tuvieron que practicar una cirugía ambulatoria en la que le abrieron el labio. Aunque no le pudieron retirar la totalidad de los biopolímeros.
El especialista le pidió que en caso de volver a presentar molestias acudiera nuevamente para que le realizaran otro procedimiento quirúrgico.
“Carolina” no quiso denunciar porque es un proceso largo y no quería perder más tiempo de su trabajo. Su nombre tuvo que ser modificado para evitar exponerla.
¿Qué son los biopolímeros y por qué se usan en cirugías plásticas?
Los biopolímeros son sustancias producidas por plantas, animales o microorganismos que se sintetizan para formar moléculas, según la Secretaría de Salud.
Se utilizan en forma de prótesis, implantes, suministro de fármacos y en la ingeniería de tejidos. Sin embargo, pueden provocar daños graves a la salud e incluso la muerte. Por ello, son considerados como un problema de salud pública en el país.
El doctor Mauricio Alejandro García López, cirujano plástico, estético y reconstructivo, explicó a Grupo Fórmula que los biopolímeros tienen más de 20 años en estudio.
Generalmente se derivan del silicón, el problema es que no todos los silicones son de grado médico, hay de grado industrial que es más económico y se obtiene de distintas maneras.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) prohibió la venta de silicona líquida para su uso con fines estéticos. Además, asociaciones internacionales de cirugía plástica y estética consideran como negligencia médica el uso de estos materiales, resaltó el secretario de Salud, Jorge Alcocer en una conferencia matutina.
Asimismo, existen los biopolímeros formados por algunos aceites, como los de cocina, los que se utilizan para ponerlos en bebés o los que se aplican a los automóviles.
El secretario de Salud informó que otros materiales ilegales que se usan como modelantes corporales en México son:
- Guayacol
- Aceite mineral y vegetal
- Grasa animal
- Colágeno bovino
- Microesferas de metacrilato
- Siliconas industriales
- Aceite de automóvil
- Aceite de olivo
- Aceite de castor
- Aceite de girasol y de sésamo
- Aceite de alcanfor de soya
- Ácido ricinoleico
- Lanolina
- Cera de abeja
El secretario también advirtió que entre los lugares en los que se aplican los biopolímeros y el resto de las sustancias ilegales están estéticas, salas de cosmética y clínicas clandestinas que no cuentan con personal médico capacitado, certificado ni autorizado.
Cada vez hay más clínicas clandestinas donde se realizan cirugías plásticas
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) clausuró 78 establecimientos de este tipo entre febrero de 2020 y mayo de 2022.
Mientras que sólo en 2022, la dependencia cerró 48 establecimientos; de los cuales 41 fueron suspendidos y 7 clausurados, de acuerdo con Bertha Alcalde, comisionada de Operación Sanitaria. En entrevista con Grupo Fórmula, detalló que lo más probable es que los que están suspendidos también sean clausurados, pero el procedimiento es largo.
La comisionada informó que las clínicas clandestinas han incrementado debido a la demanda de cirugías plásticas y procedimientos estéticos.
"Ha crecido el número de clínicas donde este tipo de procedimientos se ofertan al público. Son muchos establecimientos que no cuentan con autorización de Cofepris para poder funcionar, y cada vez la demanda crece, y cuando la demanda crece, pues la oferta crece al mismo tiempo", declaró.
Así que hasta la fecha es uno de los "focos rojos" que preocupan a la Secretaría de Salud; pues constituye una de las principales problemáticas vinculadas a riesgos sanitarios en México.
¿Cuáles son los problemas de salud que los biopolímeros pueden provocar?
Mauricio Alejandro García López explicó que el impacto que los biopolímeros pueden generar en la salud de una persona depende de la cantidad que le suministren, la zona del cuerpo, el tipo de aceite y la edad del paciente.
Los problemas de salud suelen presentarse varios años después de la aplicación en la mayoría de los pacientes y son graduales. El cirujano plástico indicó que los últimos casos que atendió tenían más de 30 años con biopolímeros y apenas habían presentado cambios en la coloración de la piel o procesos inflamatorios.
Aunque algunos pacientes que han solicitado sus servicios presentaron cambios en su cuerpo desde el primer mes posterior a la aplicación.
“Al ser tan variable la respuesta, la gente sigue cayendo en estos charlatanes que evidentemente se aprovechan de las personas que desean una mejoría en su aspecto estético”, señaló en entrevista.
Las personas a las que les inyectaron biopolímeros pueden detectar cambios en la coloración de la piel, al principio se torna color rojizo y posteriormente cambia a ocre o café; el cual se va intensificando conforme pasa el tiempo.
El especialista informó que algunos de los problemas graves de salud que los biopolímeros pueden provocar son falla renal, falla hepática, necrosis cutánea, úlceras por presión, heridas crónicas que terminan en infecciones graves y dolores articulares.
¿Los biopolímeros se pueden retirar?
Los biopolímeros sí se pueden retirar pero no al 100 por ciento. Esto depende de la cantidad que se haya aplicado y de la profundidad.
El doctor García López subrayó que no es lo mismo retirar biopolímeros de los labios, donde la cantidad que se suele aplicar es reducida a comparación de otras partes del cuerpo.
En ese caso lo único que puede suceder es que un labio quede más grueso que otro. Sin embargo, si los biopolímeros se inyectaron en músculos no se pueden retirar porque la función muscular se puede perder y los pacientes ya no podrían articular la boca para realizar funciones básicas como beber agua.
“Las personas que tienen biopolímeros en glúteo, si la cantidad está en el tejido subcutáneo, es decir debajo de la piel, la tasa de éxito es mucho más favorable porque se puede retirar en forma de bloque esa zona sin afectar el músculo y que haya un grosor suficiente para que la piel sobreviva”, agregó.
Antes de retirar los biopolímeros, los médicos tienen que realizar algunas evaluaciones y estudios para identificar cuál es el mejor procedimiento para retirarlos.
“La enfermedad por modelantes, que es así como se llama coloquialmente en el mundo médico, no tiene una cura porque siempre va a quedar un remanente para poderla retirar esa enfermedad hay que quitarlo al 100 por ciento”, detalló.
El hecho de que queden biopolímeros en el cuerpo va a provocar que la respuesta inflamatoria permanezca latente y se vuelva crónica, aunque esto dependerá del porcentaje que se haya retirado del cuerpo.
“Si se quedó un gramo, por así decirlo, pues muy probablemente el paciente no tenga alguna molestia en un futuro muy cercano y que la inflamación ni siquiera la perciba, pero si quedan 100 gramos tiene una mayor probabilidad de que la respuesta inflamatoria continúe y requiera de tratamiento continuo”, sostuvo.
¿Por qué algunas personas recurren a los biopolímeros?
Los biopolímeros se siguen utilizando porque el costo es menor que el de una cirugía plástica y que otros procedimientos estéticos.
Al respecto, el doctor Mauricio Alejandro García López precisó que los procedimientos que se realizan con biopolímeros tienen resultados inmediatos similares a los que se producirían al realizar cirugías plásticas y al ser económicos suelen generar interés entre la gente.
“Son procedimientos que van a tener un resultado inmediato y en esta ciudad y en todos lugares donde vivimos [lo hacemos] muy a prisa y casi ya no tenemos tiempo para nada”, opinó.
El cirujano plástico apuntó que a algunas personas las convencen diciéndoles que van a estar bien ese mismo día, les ofrecen un precio económico aunado a que los problemas de salud se presentan de forma gradual y no suelen ser inmediatos en varios de los pacientes.
¿Qué medidas debo tomar si me quiero hacer una cirugía plástica?
Las personas que deseen hacerse una cirugía plástica o un procedimiento estético deben asegurarse que los cirujanos plásticos con los que acudan estén certificados.
Para ello, pueden ingresar a la página del Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva (CMCPER) y corroborar que el nombre de la persona que les va a hacer el procedimiento esté en su directorio.
Lo único que tienen que hacer es darle clic a la herramienta que dice ‘Verifica a tu cirujano’. Igualmente, tienen que comprobar que las clínicas cuenten con los permisos de la Cofepris.
El doctor Mauricio Alejandro García consideró que también es necesario que los pacientes escojan a un cirujano o cirujana que tenga un alto nivel de experiencia en el área corporal que desean cambiar; pues cada uno se especializa en diferentes zonas.
Por lo que pueden pedir fotografías de resultados de otros pacientes y de esa forma van a saber si es lo que buscan o no. Otro punto importante es que estén seguros de hacerse el procedimiento para evitar realizarlo varias veces y se generen deformidades.
Los pacientes deben de saber que los resultados no van a ser iguales a los de otras personas, es decir, que no van a quedar exactamente igual porque la estructura corporal, la composición de tejidos y el grosor de la piel es diferente en cada cuerpo.
En caso de que detecten una clínica clandestina o personas que no están capacitadas para realizar cirugías plásticas que apliquen biopolímeros pueden denunciarlas ante la Cofepris a través de su página o en el Centro de Atención Telefónica 800 033 5050. Próximamente la dependencia lanzará una plataforma para verificar si las clínicas cuentan con permisos para operar.