Hasta hoy hay 432 personas desaparecidas y no localizadas en Zamora, Michoacán; una de las ciudades asesinas en México por su alta incidencia de homicidios para localidades de más de 100 mil personas y ubicada en una zona llamada "corredor de la muerte".
Ese dato sobre desapariciones representa a más de 400 personas de las que sus familias han tenido que emprender labores de búsqueda, pues de la noche a la mañana cambió su dinámica de vida. Como ellas, hay más de 100 mil personas víctimas de desaparición forzada o no localizadas en todo México.
Tal es el caso de la familia de José Antonio Andrade, taxista de Zamora que desapareció el viernes 8 de octubre del 2021.
Ocurrió cuando manejaba por el llamado “corredor de la muerte”, carretera que conecta municipios de Michoacán con Jalisco y donde habitantes identifican la incidencia de secuestros, desapariciones y homicidios.
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Judith es esposa de José Antonio, y conoce cada detalle de aquel día… Ese viernes él trabajaba en una remodelación de la casa de su mamá, pues su carro llevaba meses con fallas y lo iba arreglando para volver al sitio de taxis.
Entonces fue a llevar a su hermano Ramiro Andrade al aeropuerto de Guadalajara, en Jalisco, a unas 2 horas de la ciudad; su familiar vino de visita desde Estados Unidos. Los acompañó también su primo Paul Godínez.
“Fueron a comer a un restaurante que está sobre avenida Madero y que sale a la carretera. Salió de Zamora exactamente 3:30 de la tarde, lo sé porque revisé cámaras, lo vimos cuando pasó por la última gasolinera de La Rinconada”, relató la mujer, madre de 2 menores de edad.
A las 4:31 de la tarde, 61 minutos después, fue la última conexión de WhatsApp de su primo. “Sabemos que circularon 1 hora, ya de ahí no se sabe absolutamente nada, se los llevaron a los 3”, indicó Judith.
Ciudades asesinas: ¿Qué es el "corredor de la muerte" en Michoacán?
“Corredor de la muerte”, “corredor del peligro” o incluso “Triángulo de las Bermudas”, estos son algunos nombres que se usa entra la población y medios de comunicación para referirse a zonas colindantes y cercanas a Jalisco.
Se trata de carreteras, caminos y desviaciones que conectan a los municipios de Briseñas, Cotija, Chavinda, Jacona, Jiquilpan, Marcos Castellanos, Sahuayo, Pajacuarán, Venustiano Carranza, Vista Hermosa, Villamar, Tangamandapio y Zamora.
“En el día, en la noche, a todas horas, siempre pasan cosas ahí”, dijo Judith.
Es el mismo camino que tomó José Antonio con su hermano y primo, un camino que no desconoce, que no era la primera vez que circulaba, y en el que sólo maneja de día porque sabe de los peligros de este llamado "corredor de la muerte". También es la misma ruta que tomó Judith para buscarlo al otro día.
“Me fui pueblo por pueblo, hospital, policía, Seguro (Social), Cruz Roja. En todos lados a preguntar si los habían detenido, si tuvo un accidente, pero nadie me decía nada. No había rastros de ellos por ningún lugar. Así hasta llegar a Guadalajara”, comentó.
Como no se conoce la ubicación exacta de la desaparición de los hombres, las siguientes horas, días y semanas fueron un ir y venir entre oficinas.
Intentaron denunciar en oficinas de la Fiscalía en Guadalajara, de ahí la mandaron a la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas, pero les faltaban papeles para el trámite. Al otro día, domingo, intentaron levantar el reporte en Ocotlán, donde recordó que una persona al escuchar su caso hizo referencia a que era una situación conocida hacia el "corredor de la muerte".
“Me dijo un muchacho muy quitado de la pena: 'ay, no te preocupes, así se los llevan, los tienen 5 días y luego piden rescate'”, dijo la mujer.
Regresaron a Zamora y en la autopista encontraron a elementos de la Guardia Nacional a quienes les contaron de su caso; estos le dijeron que fueran a reportarlo a una Fiscalía.
Ya en Zamora fue a la Fiscalía local de Michoacán a levantar el reporte, donde primero emitieron alertas de búsqueda; pero tomaron más días en poder finalizar todo el proceso de denuncia. Luego pudo acceder a cámaras con las que pudo reconstruir parte de los hechos, mismos que fueron compartidos en esta publicación.
También ha contactado a colectivos de búsqueda que le informan sobre hallazgos de personas y cuerpos, incluyendo en el llamado "corredor de la muerte"; a su vez estos la acercaron con personas de la Fiscalía estatal en Morelia, capital de Michoacán, y de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, para recibir asesoría jurídica o acompañamiento; son días en que ha buscado esfuerzos y apoyo en distintos lugares.
Este jueves se cumplen 300 días exactamente desde la última vez que se vio a José Antonio, Ramiro y Paul. Es fecha en la que no tienen noticias de ellos.
La desaparición de personas en la región Zamora - Jalisco
Como Judith, hay decenas de historias que pueden encontrarse en la zona: en Jacona, municipio vecino de Zamora, hay reportes de 84 personas desaparecidas y sin localizar; en Chavinda, otra localidad aledaña, son 15, o en Tangamandapio que son 23. Son algunos ejemplos de registros oficiales.
Sólo a unos 50 kilómetros de Zamora, en Villamar, se localizó hace unos meses una fosa donde colectivos realizan labores de búsqueda; hasta ahora se han identificado los cuerpos de al menos 26 personas, pero familiares no descartan encontrar más.
Analistas en seguridad consultados en Ciudades Asesinas en México señalaron que en la región se tiene detectada una disputa entre grupos asociados a dos cárteles mexicanos.
Ello, sumado a falta de despliegue de seguridad y la impunidad, es lo que se consideró que podría sumar a la violencia que se vive en esta región, incluyendo en el referido "corredor de la muerte". Así, habitantes de Zamora y de la región no sólo se enfrentan al temor de pasar por una de las ciudades asesinas en México por su alta tasa de homicidios. La ciudadanía sabe que es sólo uno de los delitos a los que ellos o conocidos pueden estar expuestos al día.