La liberación de Rosario Robles es un acto de justicia tras más de 3 años de una aberración jurídica y todos deberíamos celebrarlo, afirmó esta tarde el periodista Salvador Camarena.
En su intervención con Denise Maerker para "Atando Cabos", el también coordinador de la investigación conocida como "La Estafa Maestra" que derivó en la revelación de un supuesto fraude cometido por la exfuncionaria federal en el sexenio de Enrique Peña Nieto, expuso que se pisoteó la presunción de inocencia de Rosario Robles con la prisión preventiva injustificada que vivió.
"Yo creo que todos tenemos que congratularnos de que el viernes haya terminado una aberración jurídica el caso de Rosario Robles, que no incluía que se haya machacado su presunción de inocencia", dijo.
"Ella tenía el derecho a tener el procedimiento, que se investigaran esos indicios periodísticos en libertad, y se le quitó ese derecho. Y durante 3 años fue víctima de lo que no se puede decir de otra forma si no que fue una venganza política", comentó.
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Además, cuestionó que durante ese periodo, la Fiscalía General de la República (FGR), encargada de investigar los hechos, no haya investigado con mayor profundidad los indicios revelados por la investigación periodística "La Estafa Maestra"; ello porque la opinión pública no ha recibido mayores detalles de los cargos contra la exsecretaria de Desarrollo Social.
De hecho, comparó, al contrario, al parecer se le ofreció acogerse a un criterio de oportunidad, con lo cual pudo tratar de evitar el ejercicio de la ley en su contra a cambio de dar información que aportara a una posible detención de un superior jerárquico, en este caso, el expresidente de la República Enrique Peña Nieto.
"En 3 años, la FGR de Alejandro Gertz Manero no le ha presentado a la sociedad solidez, documentos, nada probatorio que diga 'bueno, la señora Robles finalmente va a ser encontrada culpable, aquí están las pruebas'.
"Tan es así que se llegó hablar en algún momento de que hasta le estaban ofreciendo a ella que se volviera testigo protegido, que dijera lo que sabía para inculpar a superiores, en este caso al expresidente de la República", comentó Camarena.
Sin embargo, refirió, Rosario Robles no aceptó, por lo que su proceso se mantiene, a diferencia del de su oficial mayor, Emilio Zebadúa, quien trabajó para ella tanto en la extinta Sedesol como en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en el sexenio anterior.
"Tampoco se entiende que el oficial mayor de Rosario Robles, el señor Emilio Zebadúa, desayune muy tranquilamente en Las Lomas de Chapultepec; a cada rato se lo encuentra uno por ahí porque él quién sabe qué privilegios tiene", alegó el columnista.
Rosario Robles fue liberada el pasado viernes 19 de agosto tras 3 años de estar detenida bajo prisión preventiva, acusada del delito de ejercicio indebido del poder a raíz de estos señalamientos de desvíos de recursos cuando encabezó la Sedesol, mediante la entrega de contratos a empresas fantasma y universidades públicas por servicios no realizados.
Su salida tras el trienio detenida en el penal de Santa Martha Acatitla se dio luego de que la FGR solicitara cambiar la medida cautelar, además de que se dio en el marco de la presión ejercida por el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, quien visitó el reclusorio donde estaba Rosario Robles en mayo pasado, para buscar beneficiar a 180 mujeres cuyos casos eran similares, al contar con prisión preventiva no justificada o considerada como un abuso.
La liberación de Rosario Robles no implica que necesariamente sea inocente, sino que se cambió la medida para mantenerla controlada mientras sigue el proceso, pues tendrá que acudir a firmar cada 15 días, además de que no puede salir del país, pues entregará su pasaporte.