“No sabes si puede ser el último día de tu vida”, son parte de las palabras que usó Fernanda*, para describir cómo se siente algunos días en su natal Colima, capital del estado homónimo y una de las ciudades asesinas en México por su alta incidencia de homicidios. Visita el micrositio de este reportaje.
Basta con revisar algunos eventos recientes en medios locales y nacionales: a mediados de julio, se reportó una balacera en una carnicería cerca del centro de la ciudad.
Días antes circularon videos de otros disparos en el jardín público principal de Villa de Álvarez, municipio vecino parte de la zona conurbada de la ciudad de Colima. Por este evento murió una persona, y tres resultaron lesionadas.
Así son los escenarios a los que miles de personas se han enfrentado en estos lugares que son parte de la Zona Metropolitana de Colima–Villa de Álvarez, y que hoy son la segunda y tercera ciudad con más de 100 mil habitantes con las tasas más altas de homicidios en México.
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Lamentablemente, no es la primera vez que localidades de Colima destacan por la alta incidencia de homicidios. En los últimos cinco años, otros municipios del estado con tasas más altas, como el puerto de Manzanillo y Tecomán, hacia la costa del Pacífico, se ubicaron en este listado.
Pero desde inicios de este año, la zona metropolitana ha enfrentado jornadas de violencia que podrían considerarse 'atípicas', y que hoy llevaron a un repunte de este delito para llegar a la clasificación de "Ciudades Asesinas en México".
2022: Episodios de violencia en la Zona Metropolitana de Colima-Villa de Álvarez
¿Qué fue lo que desató la violencia homicida en la capital de Colima y la zona conurbada? Para ello tenemos que remontarnos al 25 enero del 2022, día en que hubo un motín en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de la ciudad y en el que murieron nueve personas.
Autoridades atribuyeron el conflicto a una riña entre integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y un grupo delictivo local conocido como “Los Mezcales”, quienes antes supuestamente eran aliados.
A raíz de este suceso, se desató una serie de hechos violentos en las calles de Colima, así como de municipios conurbados, que han enfrentado jornadas de violencia, e incluso, días continuos de balaceras durante febrero.
La situación llevó incluso a que la Universidad de Colima suspendiera temporalmente clases en planteles de los cinco municipios que integran la zona metropolitana: Colima, Villa de Álvarez, Coquimatlán, Cuauhtémoc y Comala.
Para darnos una idea del impacto de estos episodios, durante el primer semestre del 2021 el estado tuvo 255 homicidios dolosos, mientras que para ese mismo periodo de este año, la cifra ascendió a más de 380 según cifras oficiales.
De este total, hablamos que el 60 por ciento de los casos fueron de la capital y de Villa de Álvarez, municipio contiguo. Es decir, prácticamente uno de cada seis ocurrió en esos dos municipios.
Colima: Un estado con interés para la delincuencia
Colima, una de las ciudades asesinas de México, tuvo una tasa semestral de 78.62 homicidios por cada 100 mil habitantes, prácticamente su población de 174 mil habitantes supieron de 1 caso cada 2 días.
En tanto que en Villa de Álvarez, con 155 mil habitantes, tuvo una registro semestral de 60.37 homicidios por cada 100 mil habitantes, 1 asesinato cada 3 días. Es también una de las ciudades asesinas en México.
Antes, en 2018, Tecomán tuvo la tasa semestral más alta con 72.73 homicidios por cada 100 mil habitantes, y un año después Manzanillo encabezó este listado con una tasa de 70.11 homicidios por cada 100 mil habitantes.
Este tipo de datos pueden explicarse en parte por el interés que genera el estado para grupos delictivos por su ubicación geográfica, según comentó Carlos Rodríguez, miembro del Colectivo de Análisis de la Seguridad con Democracia (Casede).
Por ejemplo, en Manzanillo se encuentra uno de los principales puertos del país, y que se ha consolidado como punto de ingreso de precursores químicos que se utilizan para drogas, comentó el experto en seguridad.
“Esto se alimenta con el boom del fentanilo, que es un potenciador de droga. Entonces ha sido la gran novedad en el Pacífico en los últimos años”, señaló.
A este factor hay que sumar también que se trata de un estado que está entre otras 2 entidades donde también se reporta fuerte presencia de grupos de la delincuencia organizada: Jalisco en el norte y Michoacán al sur.
En un reporte de junio pasado, el Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos, país con una alta preocupación ante las muertes por sobredosis a causa de drogas, ubicó al CJNG como el grupo que tiene control sobre ciertos puertos mexicanos, incluyendo Manzanillo.
Sin embargo, en Colima se han asentado distintos grupos que buscan disputar el territorio, como el Cártel de Sinaloa o del Pacífico, así como agrupaciones locales que se “empoderan” y buscan también tomar el dominio, explicó Rodríguez.
La presencia de distintos grupos, no sólo se refleja en homicidios. El miembro de Casede indicó que esto lleva también a que haya otros delitos como el llamado “cobro de piso”, extorsiones y desapariciones.
Estos delitos cobran aún más importancia al considerar que tanto la capital como Villa de Álvarez son ciudades donde las principales actividades económicas están ligadas al sector servicios, por lo que afectan especialmente a empresarios y comerciantes.
Acciones de autoridades por violencia en Colima
Desde el Gobierno de México se ha buscado reforzar la seguridad con una mayor presencia de elementos del Ejército, Fuerza Aérea, la Marina Armada y la Guardia Nacional.
Entre ellos y los policías estatales y municipales se contaba con 7 mil 201 elementos trabajando en coordinaciones regionales del estado, según indicó en febrero pasado el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval.
A ellos se les sumaron nuevos envíos de cientos de elementos de seguridad; el más reciente fue en junio con la llegada de 300 integrantes de la Guardia Nacional a Colima.
Esto además de que se indicó que se iban a adelantar 200 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública, con el objetivo de fortalecer ese rubro en la entidad, gobernada por la morenista Indira Vizcaíno.
En entrevista con Grupo Fórmula, la alcaldesa de Villa de Álvarez, Esther ‘Tey’ Gutiérrez, dijo que entre los cambios que han hecho para fortalecer la seguridad desde el ámbito municipal están las políticas de prevención como la recuperación de espacios públicos por parte de los ciudadanos, así como mejoras en las prestaciones y apoyos de los policías municipales, como seguro de vida.
“Hemos hecho cambios en Seguridad Pública. A partir de mayo está un capitán de fragata, Inocencio Guzmán de la Peña, viene de la Secretaría de Marina y con él vienen 50 marinos a fortalecer la seguridad y hacer equipo con nuestros policías”, resaltó. “Va a ser cero tolerancia a la violencia. Nuestro compromiso es cerrar el año con menos homicidios”.
Entre los problemas que identificó como generadores de actividades delictivas señaló la falta de atención a terrenos baldíos y las casas abandonadas, especialmente en la zona sur de la ciudad, precisamente en la frontera con el municipio de Colima.
Por lo que ya trabaja de cerca con desarrolladores y propietarios para limpiarlos o avanzar en las obras a realizarse.
También afirmó que pese a llegar al cargo con la coalición del PAN-PRI-PRD, hay una “muy buena” coordinación con la gobernadora de las filas de Morena.
Grupo Fórmula también solicitó entrevistas para conocer la posición de los gobiernos municipal de Colima, encabezado por Margarita Moreno del PAN-PRI-PRD, así como con la gobernadora Indira Vizcaíno, pero no se obtuvo respuesta al cierre de esta publicación.
¿Cómo es vivir en una de las 'Ciudades Asesinas en México'?
La situación en Colima no es ajena para sus ciudadanos. En junio pasado casi 9 de cada 10 habitantes mayores de 18 años dijeron sentirse inseguros en la capital del estado, de acuerdo con la última Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU).
Fernanda* es una de las habitantes de la capital, tiene 23 años y recientemente terminó la carrera en Psicología.
Al hablar sobre el día a día en su ciudad, dijo que ha notado cambios en las actividades de la población tras los episodios recientes de violencia. En su caso, evita salir después de las 9 de la noche.
“Antes era un poco más seguro salir, pero en febrero se vio en las noticias y en las calles que encontraban cuerpos o había balaceras. No me di cuenta que la gente se quedara tanto en casa (como entonces), ni en temporada COVID”, comentó la joven.
Aseguró que ella sabía que antes la violencia se daba más en las afueras de la ciudad y en otros municipios que colindan con Jalisco y Michoacán como en Tecomán y Cuauhtémoc, pero ahora se da cuenta de situaciones así incluso cerca del centro y a cualquier hora.
A pesar de que en su círculo cercano no hay víctimas de homicidio, no quiere decir que esté lejos de la violencia. Contó que un día iba en carro, y se equivocó de calle. Ahí, una persona le impidió el paso y dijo que alcanzó a ver que tenía un arma.
“Son lugares donde es evidente. Y es curioso porque ves a la policía por esos lugares, pero no pasa nada. Si la ciudadanía ve eso, ni modo que ellos no se puedan dar cuenta”, afirmó.
Hasta que un día la ola de violencia se acercó más a su casa. Fernanda iba de salida con su mamá hacia el centro, pero a unas calles escucharon detonaciones. Primero pensaron que era cohetes, luego se percataron de que eran disparos.
Y no fueron detonaciones aisladas. Volvieron a casa para resguardarse, y después se enteraron de que fue un enfrentamiento entre policías y criminales. “Cesaban como 10 minutos y eran otros 10 minutos de tiroteos, fue muy fuerte”.
Durante la plática, Fernanda recordó un caso que la impactó: unos meses atrás, el hermano de un conocido fue a un bar con sus amigos, y en ese momento hubo un ataque armado en el lugar. El joven resultó herido y después falleció a causa de las lesiones.
“Puede ser cualquiera, uno puede ir a cenar, a pasarla bien con los amigos y no sabes si puede ser el último día de tu vida”, reflexionó la joven habitante de Colima, una de las ciudades asesinas de México.
*El nombre de estas personas fue cambiado en el texto por motivos de seguridad.