Luis Echeverría, quien fuera presidente de México entre 1970 y 1976 falleció ayer y será recordado por los mexicanos por escándalos que mancharon su mandato, tal es el caso de la "Crisis de Excélsior", un 'golpe' que marcó la historia del periodismo en el país.
El 8 de julio de 1976, en México, Julio Scherer García, quien en ese entonces era director de la cooperativa del diario, y su equipo recibieron un 'golpe' traicionero, que se denominó como un atentado contra la libertad de expresión.
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Esto se hizo para cesar las agudas críticas del periódico Excelsior contra el gobierno de Luis Echeverría Álvarez, de acuerdo con información de la revista Proceso.
Todo comenzó el 10 de junio de 1976, cuando ejidatarios encabezados por el diputado priista Humberto Serrano, líder del Consejo Agrarista Mexicano, invadió los terrenos de Paseos de Taxqueña, que era un desarrollo urbanístico que pertenecía a la cooperativa de Excélsior.
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El periódico intentaba cumplir con su misión de informar, adoptando una actitud de "buena fe", para llegar a su meta, que era "la verdad".
Sin embargo, Luis Echeverría Álvarez impulsó secretamente al grupo 'enemigo' dentro de la cooperativa para poder tomar el control y expulsar a quienes le incomodaban.
El apoyo del expresidente al interior de la redacción fue Regino Díaz Arredondo, quien encabezaba al consejo directivo y éste logró dar el 'golpe' interno.
La madrugada del 8 de julio de 1976, estaba a punto de imprimirse en los talleres la página 22 del rotativo, en la que 49 colaboradores denunciaban, bajo el título “¡Libertad de Expresión!”, la cercanía de una agresión de Estado hacia la libertad de prensa en México. Pero ese día, decenas de trabajadores ingresaron, encabezados por Díaz Arredondo, y tomaron las instalaciones del Exclélsior.
Posteriormente aparentaron que sus actos se hicieron con legalidad, en una asamblea que decidió la expulsión de Julio Scherer y quienes lo apoyaban, como Miguel Ángel Granados Chapa y Hero Rodríguez Toro, entre otros, que mantuvieron su propia asamblea en la redacción.
Los 'expulsados' habían decidido "no caer en el juego" y enfrentar la ilegitimidad de Regino, pero se les dieron quince minutos para abandonar el inmueble, o "habría fatídicas consecuencias".
Muchos medios de la época llamaron a esto "la Crisis de Excélsior", pero esto se hizo como una especie de simulacro para expulsar a los periodistas éticos de la nación.
A pesar de ello, Julio Scherer y compañía se mantuvieron firmes, por lo que cuatro meses después, en noviembre de 1969, comenzaron a realizar el semanario Proceso.
En ese sentido, el 'golpe' a Excélsior marcó la historia del periodismo en México para sus protagonistas, en sus motivos de hacer las cosas y principios, por lo que estos actos no se olvidan, pues hacerlo sería restarle la relevancia del oficio, así como a la libertad de prensa._con información de Proceso, Gaceta UNAM y la CNDH.