Que no cunda el pánico, coinciden especialistas ante el nuevo repunte de casos de COVID-19. Porque si bien van de entre 5 y 6 semanas al alza e incluso algunos hospitales ya reportan saturación en su ocupación, el impacto de la que algunos consideran como la quinta ola de la enfermedad que desde marzo de 2020 sacude al planeta puede que no sea tan grave como en otras ocasiones.
Por principio de cuentas, especialistas coinciden en que la mayor parte de la población ya sabe qué hacer ante la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2, cuya variante más extendida en el país hoy es Ómicron, por lo que de inmediato urgieron a mantener las medidas preventivas:
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- Lavado de manos constante
- Uso del cubrebocas adecuadamente en espacios cerrados y en espacios abiertos donde sea difícil mantener la sana distancia. (Que no descubra la nariz o la boca, que selle bien las entradas y salidas de aire, cambiarlo según sea el plazo más adecuado)
- Mantener ventilados los espacios cerrados
- Conservar la sana distancia cuando se esté en contacto con personas.
- En caso de presentar síntomas, aislarse por al menos 5 días.
De acuerdo con el doctor Samuel Ponce de León, también se recomienda contar con un oxímetro en casa para monitorear los signos vitales, así como realizarse pruebas en caso de presentar algún síntoma.
Aunado a ello, la inmunidad generada por las personas que ya se contagiaron, así como las personas vacunadas con un esquema completo y un refuerzo contribuirán a la reducción de la posibilidad de casos de enfermedad grave.
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Mauricio Rodríguez, vocero de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus de la UNAM, sostuvo en entrevista para la Gaceta de la máxima casa de estudios, que si bien los casos podrían ser muy numerosos, como ocurrió con la cuarta ola durante enero y febrero, se proyecta que la mayoría sean ambulatorios, leves y que se curen sin mayor problema en casa.
"Que haya pocas hospitalizaciones y muy pocas defunciones. Esto lo vamos a lograr con la protección que ya tenemos gracias a las vacunas y con el diagnóstico oportuno y aislamiento de los enfermos", comentó.
Insistió en que las personas con esquemas incompletos o sin vacunación acudan en cuanto puedan para poder tener mayor protección contra el riesgo de contraer una enfermedad grave.
No obstante, hasta la tarde del miércoles se han presentado sólo 3 casos de hospitales saturados al 100 por ciento en las camas con ventilador y 3 más con ocupación del 50 por ciento, de 800 unidades registradas en el sistema de información de la Red IRAG (Infecciones Respiratorias Agudas Graves).
¿Estamos en una quinta ola de COVID-19?
De acuerdo con el doctor Alejandro Macías, quien fuera zar en el combate a la pandemia de AH1N1 en 2009, expuso en entrevista con Óscar Mario Beteta, que a diferencia de lo que dice el gobierno federal, sí estamos en una quinta ola que apenas comienza.
"Estamos francamente en una quinta ola ya, se está viendo en todo el mundo, no es algo que se vea sólo en México. Se espera que no sería catastrófica, no se espera que colapsen los hospitales, o que sature las instituciones, va a durar tiempo. Cada oleada ha durado 6 meses, esta se esperaría que tenga menor intensidad", comentó.
Resaltó no obstante que se espera que hacia finales de año pueda haber un nuevo brote significativo, y comentó que la contagiosidad de esta variante la ha convertido en la predominante y que ha impedido que aparezca otra nueva variante. En el reporte de contagios de COVID-19 para el miércoles se informó que en México había 5 mil 245 nuevos contagios y 13 muertes.