El agua es un líquido vital para la supervivencia de los seres vivos, incluyendo a humanos y animalitos. Tiene varias funciones, desde hidratarnos, ayudar al crecimiento de las flora, hasta usos domésticos en los hogares mexicanos.
Pero, ¿de dónde viene el agua que tomamos en México?
El agua potable proviene de fuentes naturales como ríos, lagos, aguas subterráneas que es conducida por tuberías a las plantas de tratamiento, en ese proceso es purificada para que se pueda beber sin riesgo a enfermarnos, de acuerdo con la Secretaría de Salud.
Te podría interesar
Además, la calidad del agua potable que tomamos depende del lugar de donde provenga. Por ejemplo, si es agua de la zona norte, su composición tiene mucha mayor concentración de minerales que el agua de la zona sur.
El tipo de fuente predominante es la subterránea, con el 56.7 por ciento del volumen. En el periodo del 2009 al 2018 el agua superficial asignada para este uso creció un 31.6 por ciento.
Te podría interesar
La mayor extracción de agua en las regiones es en regiones con grandes extensiones de agricultura de riego, como Noroeste y Pacífico Norte, mientras que en el Valle de México se realiza con menor cantidad, como en el Sistema Cutzamala, Frontera Sur y Pacífico Sur.
En la Ciudad de México, el 56 por ciento del abastecimiento proviene 976 pozos que se extrae principalmente del subsuelo de Valle de México; de ahí la relevancia de aprovecharla, cuidarla y preservarla.
¿Cuánta cobertura de agua potable hay en México?
De acuerdo con la secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnart) en México, la cobertura de agua potable en 2004 fue de 89.5 por ciento, pese a que en las zonas urbanas suele ser mayor que en las rurales.
En ese entonces, se suministraron más de 320 mil litros de agua por segundo para consumo humano, de los cuales el 95 por ciento fue desinfectado.
10 años después, en 2014, la Comisión Nacional de Agua informó que el agua destinada al consumo humano representó el 14.65 por ciento, equivalente a 11.96 km3/año.