El Tren Maya está acercándose a su fecha de inauguración; sin embargo, ¿te has preguntado cuándo inició la historia del ferrocarril en México? Te contamos.
Para ello, debes remontar a 1837, cuando el presidente Anastasio Bustamante le otorgó al exsecretario de Hacienda, Francisco Arriaga, la construcción de la primera línea ferroviaria.
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Esta línea pretendía conectar al puerto de Veracruz con la capital del país. Sin embargo, hasta septiembre de 1850 se inauguraron los primeros 13 kilómetros, detalla el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Luego, en 1880, se incorporó el Mexican National Railway, entendido al español como Ferrocarril Nacional Mexicano, gracias al general norteamericano William Jackson Palmer y sus colegas del Denver y Rio Grande Railway.
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Esto respondía a aprovechar la línea que estaba por llegar a El Paso, Texas. "Fue hasta septiembre de 1888 que se terminó de construir una vía angosta que unía Nuevo Laredo - no El Paso, Texas ni Paso del Norte, Chihuahua - a la Ciudad de México", refiere el INAH.
En las siguientes dos décadas se construyeron y se compraron otras vías que incorporaron Veracruz, Querétaro, Acámbaro, Uruapan, Maravatio, Zitácuaro, Angangeo, Colima y Manzanillo, Matamoros y Pachuca, entre otros lugares.
Tren Maya: ¿Cuándo se nacionalizó Ferrocarriles Nacionales de México?
En 1908, Porfirio Díaz creó el 29 de febrero al organismo público descentralizado Ferrocarriles Nacionales de México (FNM) con el objetivo de administrar las concesiones de todos los ferrocarriles del país.
El INAH retoma que en 1937, bajo la gestión del entonces presidente Lázaro Cárdenas, se anunció por decreto la expropiación de Ferrocarriles Nacionales de México, así como de la mayoría de las líneas que hasta entonces quedaron independientes y semi-independientes.
Fue así que en 1938 se nacionalizó Ferrocarriles Nacionales de México convirtiéndose en los sesenta años posteriores en un factor dominante en la infraestructura y desarrollo del norte de México.
Sin embargo, llegando Ernesto Zedillo a la Presidencia, fue vendido a cuatro instituciones diferentes. Finalmente, en julio de 2001 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la extinción de Ferrocarriles Nacionales de México.