En la última semana se dio a conocer que existen alrededor de 30 casos sospechosos de hepatitis infantil aguda en México, la cual estaría relacionada con los casos de COVID-19 y adenovirus, pero ¿qué es este virus?
De acuerdo con la Secretaría de Salud, la hepatitis aguda de origen desconocido se registró por primera vez en Reino Unido y hasta el 21 de abril se habían notificado al menos 169 casos en niños de 1 mes a 16 años, en 12 países, incluyendo una defunción.
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Aunque hasta el momento no se ha identificado la causa de esta enfermedad, el adenovirus es la hipótesis más estudiada, pero ¿qué es eso?
La Secretaría de Salud explicó que se trata de un virus icosaédrico sin envoltura con un genoma de ADN de doble cadena, que pertenecen a la familia Adenoviridae y tienen un diámetro de aproximadamente 90 nanometros.
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Se han identificado más de 120 serotipos de adenovirus en diferentes especies incluidos los humanos y se clasifican en genotipos de la A-G.
¿Qué causa el adenovirus?
El adenovirus se transmite por gotas que se expelen cuando una persona tose o estornuda, así como por restos fecales que se propagan en el agua u otros medios.
A veces, el virus puede eliminarse durante mucho tiempo después de que una persona se recupera de una infección, especialmente entre las personas que tienen sistemas inmunitarios debilitados.
La Secretaria de Salud destacó que la “excreción del virus” generalmente ocurre sin ningún síntoma, aunque la persona aún puede transmitir el adenovirus a otras personas mientras lo presenta.
Además, el adenovirus causa infecciones respiratorias, oculares, urinarias, gastrointestinales y ocasionalmente hepatitis, y en personas con inmunocompromiso se puede desarrollar cuadros graves.
El diagnóstico de adenovirus se realiza por prueba PCR y cultivo, pero no existe un tratamiento específico para las personas con infección por adenovirus.