Este viernes la Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGE) confirmó que los siete cuerpos calcinados al interior de un vehículo que fueron hallados en la comunidad de San José el Nuevo, en el municipio de Celaya, corresponden a los integrantes del grupo musical “Los Chuparrecio”.
Dicha agrupación estaba conformada por seis integrantes, seis adultos y un joven que los ayudaba para instalar sus instrumentos y el audio durante sus presentaciones, pero también eran acompañados por otro hombre, quien se desempañaba como miembro de su staff.
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La banda musical estaba conformada principalmente por los hermanos Armando de 54 años, quien se desempeñaba como bajista del grupo y Javier Pérez Altamirano, de 51 años, pianista y cantante.
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También formaban parte sus hijos Javier Pérez Pérez, Francisco, Miguel y José Pérez Maldonado. Mientras que el ayudante fue identificado como Juan Diego Pérez Maldonado, de 15 años, y el integrante del staff fue identificado como Beto.
Los Chuparrecio eran originarios de la comunidad de Juan Martín, en Celaya, lugar donde ofrecían la mayor parte de sus presentaciones en fiestas privadas, jaripeos y en el templo de Juan Martín.
Se sabe que sus múltiples shows los hicieron populares en su lugar de origen, gozando de una trayectoria que rondaba alrededor de tres décadas.
¿Qué pasó con Los Chuparrecio?
Familiares de las víctimas informaron que el pasado 22 de marzo, la agrupación y los dos miembros de su staff salieron de la comunidad de Juan Martín alrededor de las 15:00 horas con rumbo a Rancho Seco, lugar donde tendrían una presentación.
Sin embargo, no llegaron a su compromiso, pues ocho horas después, siete de ellos fueron encontrados sin vida al interior de una camioneta marca Ford F-150 color rojo, la cual, se encontraba en llamas.
Poco después autoridades hallaron otro cuerpo sin vida kilómetros más adelante, el cual presentaba huellas de tortura y estaba maniatado, mismo que correspondía al miembro de su staff de nombre Beto.
Los cuerpos calcinados también fueron encontrados con impactos de bala, por lo que se cree que murieron momentos antes de que la camioneta fuera incendiada.