Muchos piensan que el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su familia han sido los únicos habitantes de Palacio Nacional desde que Porfirio Díaz dejó de utilizar este inmueble como residencia presidencial, sin embargo, antes que el tabasqueño se mudara ya había más de una veintena de residentes en el recinto: una manada de gatos.
Zeus, Ámbar, Panza, Carrusel, Bombonetes, Jazz, Godín, Sol, Canela, Capulín y Pecas son los nombres de algunos de los casi 20 gatos que viven y rondan por los jardines de Palacio Nacional desde alrededor de 20 años.
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Para muchos, la existencia de los felinos que habitan en el inmueble desde dónde despacha el presidente López Obrador era desconocida hasta 2019, cuando se viralizó la noticia en redes de que el gobierno de la Cuarta Transformación (4T) había decidido “dormirlos” como una medida más de la austeridad republicana, sin embargo, la Secretaría de Hacienda desmintió lo anterior y aseguró que se trató de un malentendido.
Actualmente, casi una veintena de gatos siguen viviendo libres en los jardines de Palacio Nacional bajo el cuidado de Hacienda y la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM, y se han vuelto parte del día a día de los funcionarios que ahí laboran.
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A continuación te contamos la historia de estos felinos que viven en Palacio Nacional, con motivo del Día Internacional del Gato que se conmemora este 20 de febrero.
Así llegaron los gatos a Palacio Nacional
Despreocupado e indiferente, como suelen ser la mayoría de los gatos, Zeus se pasea todos los días por los jardines de Palacio Nacional, aunque de vez en cuando suele visitar las oficinas de la Secretaría de Hacienda para recibir algunas caricias de los servidores públicos que ahí laboran.
Si bien no existe un registro preciso acerca de cuándo o por qué motivo llegaron estos felinos a vivir a este recinto, personas que actualmente laboran ahí coinciden en que llevan habitando este lugar desde hace aproximadamente 20 años.
Según cuentan, en un inicio algunos gatos fueron llevados a Palacio Nacional como un método de control de plagas para combatir a los ratones y palomas que dañaban el que es considerado el edificio más importante de México.
Sin embargo, debido a la falta de atención y esterilización, la población de gatos aumentó de forma considerable al pasar de los años debido a que comenzaron a reproducirse entre ellos, además de que algunos empleados aprovecharon la situación para abandonar en este lugar a sus mascotas cuando deseaban deshacerse de ellas.
Fue así como estos felinos se convirtieron en parte del día a día de Palacio Nacional, por lo que incluso algunos funcionarios, como es el caso de Carmen Hernández quien trabajó en la Secretaría de Hacienda, se encariñaron con ellos, comenzaron a alimentarlos y a mimarlos.
Así, durante aproximadamente 2 décadas, esta manada de gatos pudo vivir feliz dentro de los muros de Palacio Nacional; sin embargo, con la llegada de la Cuarta Transformación encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, surgieron rumores acerca de que sus días en los amplios jardines de la nueva residencia presidencial estaban cerca de terminar.
#ConLosGatosNo
Desde que ganó la elección presidencial en 2018, una de las principales promesas del presidente Andrés Manuel López Obrador fue la de implementar la llamada “austeridad republicana” para reducir los gastos en su administración, medida que fue respaldada por una gran mayoría, pero fuertemente criticada por otros sectores de la población.
Algunas de las medidas tomadas por el gobierno de la Cuarta Transformación como parte de la llamada “austeridad republicana” fueron reducir el sueldo de funcionarios públicos, eliminar fideicomisos, guarderías infantiles para madres trabajadoras y modificar la estrategia de compras de medicamentos.
La noticia de estos recortes llegó a Palacio Nacional, lo que sumado a una orden a los trabajadores para que no alimentaran a los gatos, provocó que comenzara a circular el rumor de que la nueva administración tenía planeado “dormir” a los felinos como una medida más para ahorrar dinero.
Carmen Hernández, quien trabajó en la Secretaría de Hacienda de 2013 a 2016, es una de las funcionarias que más se encariñó con los felinos, por lo que aun cuando ya no trabajaba en la dependencia, acudía cada semana a dejar alimento para los animalitos y a constatar que estuvieran en buenas condiciones.
Al enterarse de los rumores acerca de que la vida de los casi 20 gatos que viven en Palacio Nacional corría peligro, la mujer denunció esta situación a través de una publicación en sus redes sociales, misma que se hizo viral y unió a miles de usuarios que se manifestaron en contra del aparente sacrificio de los animalitos con el hashtag #ConLosGatosNo.
“La nueva administración en @SHCP_mx, en concreto la gente de Conservaduría, no quiere que estén los gatos. Al parecer es más importante que el edificio se convierta en patrimonio histórico o casa de López que la vida de 20 gatos”, acusó la mujer en un tuit publicado en mayo de 2019.
Ante la gran indignación que generó esta denuncia en usuarios de redes sociales y la sociedad en general, la Secretaría de Hacienda de inmediato desmintió que su intención fuera la de sacrificar a los gatos que viven en Palacio Nacional.
La dependencia detalló que los gatos fueron capturados con el fin de realizarles un chequeo para verificar su estado de salud, si estaban esterilizados y en caso de que no fuera así poder esterilizarlos y mantener así controlada su población.
A través de múltiples publicaciones hechas en todas sus redes sociales, la Secretaría de Hacienda detalló que los felinos serían atendidos por especialistas de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Un par de días después de la polémica surgida en redes sociales ante el rumor del supuesto sacrificio de los gatitos, Hacienda compartió una serie de videos y fotografías en las que mostraba que todos los felinos ya habían sido liberados en los jardines de Palacio Nacional para poder seguir viviendo ahí lo que les resta de sus 7 vidas.
¿Cómo viven actualmente los gatos de Palacio Nacional?
A raíz de toda esta polémica, los gatos de Palacio Nacional saltaron a la fama y se robaron el corazón de más de un mexicano, por lo que la Secretaría de Hacienda suele compartir en sus redes sociales fotografías de estos famosos felinos paseando por las oficinas y jardines del recinto.
De acuerdo con la dependencia, los gatos de Palacio Nacional actualmente continúan viviendo libremente en los jardines del recinto, en dónde son alimentados y atendidos.
Por su parte, Carmen Hernández, quien denunció el supuesto “sacrificio” de los gatitos, declaró para Grupo Fórmula que algunos conocidos de ella que continúan laborando en el recinto le confirmaron que los animalitos siguen habitando ahí y son alimentados por personal de Hacienda.
Sin embargo, lamentó que luego de haber hecho su denuncia en redes sociales le fue prohibido ingresar de nuevo a Palacio Nacional para ver a los gatos, por lo que únicamente sabe de su estado gracias a fotografías que le envían.
“Sé el estado de algunos porque me llegan fotos, pero yo no los he visto”, contó.
Si bien, los gatos de Palacio Nacional son los más famosos, también existen felinos viviendo en otros recintos gubernamentales, como en la Cámara de Diputados o en el Palacio de Lecumberri, sede del Archivo General de la Nación.