La violencia en las relaciones sexoafectivas de la que son víctimas miles de mujeres en México cada vez es más visible. En el marco del 14 de febrero, Día del Amor y la Amistad, vale la pena preguntarse cómo identificar una relación violenta.
En 2021 el 911 recibió 259 mil 452 llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia de pareja, es decir, agresiones infringidas por la pareja que incluyen maltrato físico, sexual, emocional y comportamientos controladores, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
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Además, la Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado 2021 (Enbiare) reveló que de 30 millones 372 mil 600 mujeres encuestadas que dijeron tener pareja, sólo el 88.7 por ciento aseguró tener una buena relación y 11.3 por ciento dijo que no es buena.
La psicoterapeuta y fundadora de Mujeres Psinfronteras, Valeria Sánchez, advirtió que existen 6 tipos de violencia que las mujeres pueden experimentar en una relación de pareja: física, sexual, psicológica, emocional, patrimonial y económica.
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En entrevista con Grupo Fórmula, explicó que la violencia física consiste en causar daño al cuerpo por medio de una agresión. ONU Mujeres indicó que puede ser con golpes, quemaduras, pellizcos, empujones, jalones de cabello, mordidas, empleando cualquier otro tipo de fuerza física contra ella, impidiendo que reciba atención médica u obligándole a que consuma alcohol o drogas.
La violencia psicológica involucra una serie de herramientas mentales de manipulación, según la especialista en psicología. En este sentido, la Organización detalló que se puede producir al provocar miedo a través de la intimidación; amenazar con causar daño físico a una persona, su pareja, hijas o hijos, a sus mascotas y bienes; en someterla a maltrato psicológico o forzarla a aislarse de sus amistades, de su familia, de la escuela o del trabajo.
Mientras que la violencia económica y patrimonial se producen mediante la dependencia financiera. En estos casos el agresor mantiene un control total sobre los recursos financieros o bienes y le impide a la víctima acceder a ellos. También le prohíbe trabajar o asistir a la escuela.
Valeria Sánchez agregó que ambos tipos de violencia son más comunes en parejas adultas.
¿Cómo saber si estoy en una relación violenta?
La intuición es una herramienta importante para que las mujeres se den cuenta que están en una relación violenta. Aunque pareciera que es un término alejado de la ciencia, añadió la psicoterapeuta, está comprobado que los seres humanos cuentan con las habilidades para identificar cuando algo no va bien.
"De acuerdo con la sociedad machista muchas mujeres suprimimos estas habilidades a las que llamaré intuición, que es como el retorno a mí misma", sostuvo.
Al mismo tiempo, las redes de apoyo, como la familia y los amigos, son necesarias para contar con acompañamiento. Muchas veces identifican que hay violencia y lo comunican a la víctima.
El cuidado de la salud mental es otra de las herramientas fundamentales, expuso; ya que es posible prevenir una relación violenta o codependiente. De esta forma las mujeres pueden trabajar en sus relaciones interpersonales, autoestima, percepción y valor como persona.
Aunque es común que las mujeres lleguen a terapia cuando fueron agredidas. Sin embargo, no siempre es posible acceder a estos servicios porque tienen un costo y no todas pueden pagar.
Existen colectivas y organizaciones feministas, como Mujeres Psinfronteras, que proporcionan atención gratuita a mujeres o entregan becas con descuentos para quienes necesitan psicoterapia.
Otro factor igual de necesario es que las mujeres eviten dejar de hacer las cosas que les gustan o las actividades que realizan solas, sin que su pareja esté con ellas.
¿Cómo salir de una relación violenta?
La fundadora de Mujeres Psinfrontreras aseguró que el primer paso para salir de una relación violenta es reconocer que se trata de un problema político; es decir, que no se trata de un asunto privado, ni aislado, porque está relacionado con la violencia de género institucionalizada y normalizada por el sistema patriarcal para oprimir a las mujeres.
"El primer punto es reconocer que esto nos ha pasado a más mujeres de las que imaginamos, politizar el problema que estamos viviendo nos hace sentir más acompañadas en el proceso", expresó.
Las mujeres que sean violentadas en una relación deben saber que no son las únicas a las que les ha pasado y que están en una situación difícil.
Por ello, es indispensable “tejer vínculos” entre mujeres que han pasado por la misma situación y compartir experiencias, destacó Valeria Sánchez. Eso provoca que las víctimas se sientan más acompañadas durante sus procesos y se culpen por estar en una relación violenta.
El contacto cero o lo que es igual a alejarse del agresor y cortar cualquier tipo de comunicación es otra de las acciones para salir de una relación violenta. Aunque hay algunas mujeres que viven con sus agresores.
En esos casos, la especialista en psicología recomendó alejar a su pareja poco a poco. Por ejemplo, si iban juntos a la iglesia, empezar a ir con amigas.
"Muchas veces es difícil porque estas personas son violentas y en su mayoría físicamente y ahí también sería pedir ayuda de la gente que esté a tu alrededor para mantener el contacto cero", añadió.
Las instituciones jurídicas y de procuración de justicia también pueden ayudar, afirmó, al presentar una denuncia y solicitar órdenes de restricción.
Preguntas que pueden servir para saber si estás en una relación violenta
Algunas preguntas que pueden funcionar para identificar que las mujeres están en una relación violenta son las siguientes:
- ¿Estás más decaída o con menos ganas de realizar tus actividades?
- ¿Has dejado de tener iniciativa para realizar actividades nuevas o conocer gente nueva?
- ¿Tienes discusiones con frecuencia con tu pareja con las que no llegan a ningún acuerdo?
- ¿Tu pareja ha sido agresiva físicamente o ha jugado de manera brusca contigo?
- ¿Has modificado tu manera de vestir o arreglarte?
- ¿Sigues teniendo el mismo contacto con tus amigas y amigos de siempre?, ¿no los has dejado de ver con la frecuencia de antes?
- Si antes realizabas actividades de ocio o creatividad, ¿las sigues haciendo?
- ¿Tienes problemas de ansiedad desde que comenzó la relación?
- ¿Constantemente estás preocupada por no hacer enojar a tu pareja?
- ¿Tu pareja no acepta un no por respuesta?
- ¿Has mantenido actividad sexual sin quererlo por presión de tu pareja?
- ¿Tu pareja te ha desvalorizado o hecho sentir insuficiente?
- ¿Tu pareja suele tomar todas las decisiones de la relación: aficiones, salidas, amistades?
- ¿Tu pareja intenta hacerte sentir culpable con frecuencia?
- ¿Tú y tu pareja rompen y se reconcilian varias veces?
- ¿Tu pareja te ha privado de tu libertad encerrándote en un cuarto o quitándote tu celular?
- ¿Cambiaste tus gustos y aficiones por las de tu pareja?
- ¿Ha bajado tu rendimiento en la escuela o en el trabajo debido a tus problemas de pareja?
- ¿Tienes repentinos cambios de humor sin causa aparente?
- ¿Tu pareja te ha llamado sólo para comprobar que estás donde dices estar?, ¿crees que en general desconfía de ti?