El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) es el principal enemigo de la democracia ahora que se benefició de la lucha democrática de la sociedad, por lo que quiere "agandallar" al Instituto Nacional Electoral (INE) con su propuesta de reforma electoral junto con su partido, Morena, advirtió el académico Sergio Aguayo.
El investigador, quien anteriormente ha mostrado su coincidencia con el presidente AMLO, sobre todo en cuanto a la versión de que hubo un fraude electoral en 2006 en su contra, elección que consideró que ganó el tabasqueño, ahora arremetió contra su iniciativa que busca erradicar la democratización de las votaciones, misma que lo benefició para llegar al poder.
"Andrés Manuel López Obrador es el principal enemigo de la democracia en estos momentos", afirmó. "Estamos ante un agandalle del presidente y su partido por donde le quieran ver. No tiene justificación ni ética ni histórica ni teórica el quererse apropiar del nombramiento de los consejeros. No le pertenece el INE, que es patrimonio nacional".
Por ello, comparó la propuesta de reforma electoral que lanzó AMLO con lo que ocurrió con el proceso electoral de 1988, cuando el entonces candidato presidencial del PRI, Carlos Salinas de Gortari, ganó la elección frente al opositor Cuauhtémoc Cárdenas, tras una misteriosa "caída del sistema", de la que se señala al hoy funcionario de la 4T Manuel Bartlett como principal operador.
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"Porque la propuesta que están haciendo encubre ese objetivo de fondo, nombrar a los consejeros para apoderarse del INE y se quieren apoderar del INE para garantizar que van a ganar las elecciones del 24. Así como lo hizo Carlos Salinas y Manuel Bartlett en el 88, así lo están queriendo hacer. Todavía no lo logran", sostuvo.
Además, cuestionó que el actual presidente tome esta posición cuando su triunfo electoral se basó en los avances en materia democrática y el establecimiento de un árbitro electoral neutral.
"Él se benefició de la lucha que dio la sociedad, que dimos a favor de la democracia. La lucha por la democracia tuvo multiplicidad de frentes; el principal fue que las elecciones las manejara un árbitro imparcial. Esa es la esencia de la generación que hicimos la transición, porque no la hizo López Obrador, ni los partidos, la hicieron los partidos y sobre todo la sociedad", explicó.
Reforma electoral de AMLO, una trampa
También advirtió que para imponer este nuevo orden donde el árbitro electoral, en este caso el organismo que reemplace al INE, la propuesta cuenta con medidas que son necesarias, como reducir el costo de los partidos políticos y de los procesos electorales en general.
"Lo que Andrés Manuel López Obrador está haciendo es una infamia, está aprovechándose de algunas reivindicaciones correctas que es reduciendo el costo de las elecciones, totalmente de acuerdo, pero ahí está infiltrando la ponzoña de quererse apoderar del nombramiento de los consejeros", aseguró.
Como previsión ante una posible respuesta del mandatario, que buscará descalificarlo por no haber criticado a otros gobiernos, el académico recordó su labor y negó haberse beneficiado de otras administraciones.
"A mí no me puede descalificar por haber estado en los viejos regímenes. Jamás he estado, jamás he recibido prebendas. Siempre he sido un analista independiente y desde la academia, criticando a unos y otros, y yo no he cambiado. Quien sí ha cambiado es el ahora presidente", sostuvo.
Desde abril pasado, el presidente AMLO presentó su iniciativa de reforma electoral que busca reducir el financiamiento al INE, quitar el gasto público a partidos, reducir diputados y senadores, así como que los consejeros y magistrados electorales se elijan por voto popular.