La reforma electoral promovida por el Ejecutivo federal fortalece los vicios de la democracia y debilita la pluralidad del sistema electoral mexicano, consideró Gibrán Ramírez, politólogo y excandidato a la dirigencia nacional de Morena. Declaró que la actual iniciativa busca terminar con la autonomía del Instituto Nacional Electoral (INE).
En una entrevista concedida a Denise Maerker, para Grupo Fórmula, Gibrán Ramírez explicó que los cambios que busca la reforma electoral asemejan "al priismo más autoritario, más duro, más represor" y acusó que el gobierno federal quiere tener "el control de todo el proceso" electoral, tal como sucedía con la Comisión Federal Electoral entre 1951 y 1990.
El político allegado a Ricardo Monreal dijo que la nueva iniciativa da "más incentivos para la simulación y para el fraude" a la ley, tal como sucedió en la Revocación de Mandato, pues -según Gibrán- Morena se "inventó" una asociación civil (Que siga la democracia) para publicitar dicho ejercicio, el cual se llevó a cabo el pasado mes de abril.
En resumen: más que mejorar, más que atacar los principales problemas, que son las cúpulas partidistas y el dinero ilegal en las campañas, fortalece el espacio para estos vicios y retrocede en materia de pluralismo", comentó Gibrán Ramírez.
Para Gibrán Ramírez, los militantes de Morena obedecen y no hay un "pensamiento propio" hacia las iniciativas diseñadas por el Ejecutivo federal, "hace muy difícil que las voces que podrían estar en contra, se expresen", declaró. Adelantó que hay legisladores de dicha fuerza política se oponen a la iniciativa.
El meollo de la reforma electoral, según el politólogo, es ejercer el control político y se manifestó en contra de dicha iniciativa, la cual espera que encuentra oposición tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado de la República; también hizo un llamado a respetar las ideas de quienes están en contra.
¿Qué busca la reforma electoral que promueve el Ejecutivo?
La iniciativa de reforma electoral busca una serie de cambios dentro del sistema electoral y legislativo en México, entre los que se encuentra la creación del Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC), la elección popular de los consejeros del INEC y magistrados del Tribunal de Justicia Electoral.
El periodo de elección de los consejeros y magistrados pasaría a ser de seis años, para coincidir con el periodo sexenal; la desaparición de los órganos estatales electorales y la centralización de las funciones. Los detractores de la medida afirman que Morena busca el control de dicho órgano electoral, todo de cara a futuros comicios.
Asimismo, la reforma electoral también plantea un posible aumento de los legisladores plurinominales, es decir, todos aquellos que son elegidos bajo el principio de mayoría relativa. De momento, tal iniciativa se encuentra en el Legislativo, donde se prevé que PAN, Movimiento Ciudadano (MC) y PRD se posicionen en contra; la postura del PRI sigue en duda.