El Callejón del Beso, que está clausurado desde esta semana a causa de un conflicto con los propietarios de las viviendas aledañas, es capaz de reunir más gente que el Necaxa y puede juntar hasta 20 mil personas en un solo día, de acuerdo con el alcalde de la ciudad de Guanajuato, Alejandro Navarro.
En entrevista para Joaquín López-Dóriga, el funcionario municipal reiteró que el plan por ahora contempla incluso expropiar las viviendas que rodean el célebre callejón, aunque confió en que se alcanzará un acuerdo satisfactorio para todas las partes.
"De hecho estamos aprovechando ahorita para cambiar alumbrado pintura tizada y algunas cosas elementos que estorbaban porque la verdad es que se me juntan hasta 20 mil turistas en un solo día, es complicado", dijo.
Sobre los permisos para tomar fotos, explicó que sólo 3 fotógrafos tienen permiso de más de 30 años para el ejercicio de esa actividad, a la par que los dueños de las dos casas también quieren tomar fotos.
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"Es ahí donde se han suscitado estos conflictos que desafortunadamente nos dieron este tema de cerrar o de clausurar el callejón", detalló a López-Dóriga en Grupo Fórmula.
Apenas el miércoles se dio a conocer la clausura del Callejón del Beso en la ciudad de Guanajuato, ante diferencias con los propietarios de las viviendas aledañas y quienes realizan actividades en la zona.
¿Cómo surgió el Callejón del Beso?
La leyenda de este emblemático destino turístico y donde todos quieren una foto, incluso antes de la era del Instagram, se dio por la historia de Ana y Carlos, dos jóvenes que se amaban en secreto de sus familias y que el único espacio para encontrarse que tuvieron fue el punto donde se encuentran los balcones de dos viviendas, donde actualmente se ubica el Callejón del Beso.
Entre las propuestas para resolver este problema, el presidente municipal de Guanajuato le planteó al gobierno de la entidad que se expropiaran ambas viviendas a favor del ayuntamiento, con lo que se podría ejercer la actividad turística sin mediación de los propietarios.