David Monreal, gobernador de Zacatecas, ofreció su postura respecto al hallazgo de 10 cuerpos al interior de una camioneta gris que dejaron frente al palacio de gobierno en la madrugada del jueves, por lo que hizo un llamado a "encomendarse a Dios" ante la ola de violencia que atraviesa aquella entidad.
El mandatario explicó que "el principal reto es la inseguridad" y aseguró que se trata de una "herencia maldita", "un asunto de todos". Insistió en que no moverán el dedo del renglón, por lo que se seguirá aplicando la estrategia de paz y seguridad implementada por el gobierno federal.
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Comentó que el Plan Zacatecas II, presentado el 24 de noviembre por el presidente Andrés Manuel López Obrador "ha dado resultados" y que disminuyeron los índices delictivos a finales de diciembre, "poco a poco, vamos a ir recuperando nuestra paz", declaró el hermano de Ricardo Monreal a través de una transmisión en Facebook.
No hay que desistir, al contrario, hay que seguir luchando, pedirle a nuestra gente que todos nos cuidemos, que estemos atentos (...) hay que encomendarnos a Dios", declaró Monreal.
Adelantó que el próximo domingo presentará cifras del comportamiento del delito, pero señaló que hubo un aumento de homicidios durante 2020, siendo diciembre uno de los más violentos con 140 homicidios. Luego ofreció las cifras de 2021, donde señaló que "el pico más alto" fue en septiembre con más de 200 homicidios.
El mandatario culpó al neoliberalismo de la "descomposición" que ha sufrido la sociedad y añadió que "le duele mucho" cómo dejaron a Zacatecas.
Precisó que al filo de las 5:20 horas del jueves dejaron el vehículo frente al palacio de gobierno de Zacatecas y que la persona que lo conducía huyó por un callejón. Están realizando pesquisas sobre el vehículo, para determinar quién es el propietario o si tiene reporte de robo.
Fuera del tema de la inseguridad, David Monreal solicitó no bajar la guardia ante el repunte de contagios ocasionado por la pandemia de COVID-19, más ante la variante Ómicron.