La vacunación contra la COVID-19 continúa presente en todos los estados de la República a la par del incremento de contagios, por lo que más de una persona tiene la duda de cuándo es el momento ideal para recibir el antídoto de refuerzo después de la recuperación.
De acuerdo con Samuel Ponce de León, titular de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia Coronavirus, quienes padecieron COVID-19 en esta nueva ola deben aplicarse la vacuna de refuerzo, si ya es candidato, en cuanto sea posible.
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“Después de haberse enfermado y una vez que desaparecen las molestias, tampoco hay problema en que se apliquen la segunda dosis, esquema inicial o vacuna de refuerzo. No hay un lapso rígido que se tenga que cumplir. Esperar que pasen 30, 60 o 90 días no son de utilidad”, informó el especialista, según la Gaceta de la UNAM.
Además, subrayó que quienes tengan el esquema completo de vacunación deben ponerse la vacuna de refuerzo y la de la influenza para mejorar su estado inmunológico “quizás con una mayor eficacia que haber tenido COVID”.
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Por su parte, Mauricio Rodríguez Álvarez, profesor de la Facultad de Medicina y miembro de la misma comisión de la UNAM, resaltó que si tuviste COVID, sí te puedes poner la vacuna, ya que no hay un tiempo específico.
Sin embargo, mencionó que quizá el único requisito es que la persona se encuentre bien clínicamente, es decir, que no tengas ningún problema agudo en ese momento: fiebre, dificultad respiratoria, descompensación ni por COVID u otra enfermedad.
En caso de que te hayas vacunado y tu última dosis de cualquier vacuna fue antes de cinco meses, debes esperar a que cumplas dicho periodo, como lo estipuló la Secretaría de Salud federal.
¿Puedo vacunarme con COVID prolongado?
El investigador Samuel Ponce de León explica que los síntomas de la COVID-19 se presentan durante cuatro o seis semanas, por lo que el síndrome post covid puede aparecer semanas después de resolver el caso agudo.
Dicha manifestación clínica se describe como fatiga crónica y muy intensa, cansancio, dolor de cabeza y dolores osteomusculares que pueden ser “difíciles de resolver”. Sin embargo, la vacuna puede recibirse sin mayor problema.